Nueva York. La cadena de noticias CNN, en una crisis de identidad y audiencia, quiere centrarse en una nueva oferta digital de pago que genere más de $1.000 millones y va a despedir a un centenar de personas, comunicó este miércoles a sus equipos su director ejecutivo, Mark Thompson.
La búsqueda de una nueva estrategia para hacer frente a la competencia del streaming a la televisión por cable, de la que la CNN es un emblema, se ha convertido en los últimos años en una historia de nunca acabar para la cadena, conocida por haber revolucionado la emisión de todo tipo de noticias.
CNN lanzó un servicio de streaming de pago en el año 2022, CNN+, pero se cerró de golpe al cabo de un mes porque ya no encajaba en los planes de fusión entre WarnerMedia (CNN, HBO Max) y Discovery. Un año después, el director ejecutivo de CNN, Chris Licht, que había sido cuestionado internamente, dimitió y fue sustituido por el británico Thompson, exdirectivo de la BBC y del New York Times.
En una extensa nota a todos los empleados, Thompson anunció “un negocio digital de más de mil millones de dólares para el futuro”, que incluye suscripciones de pago a productos exclusivos de “noticias” y “análisis”, además de los contenidos ya disponibles por cable e Internet.
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En concreto, habló de una gama de ofertas pagas que ayuden a sus usuarios a vivir una vida mejor, basadas en el periodismo de estilo de vida, “donde CNN está particularmente bien posicionada”. Este plan comenzará antes de finales de 2024 con el lanzamiento de la primera suscripción a “CNN.com”.
El directivo de CNN anuncia también la fusión de sus tres redacciones (estadounidense, internacional y digital) en una sola. En el marco de esta reorganización, se suprimirán unos 100 de los 3.500 puestos de trabajo, según Thompson.
El anuncio de este proyecto llega en un momento en que CNN espera recuperar su audiencia gracias a las elecciones presidenciales estadounidenses. La cadena consiguió imponerse a sus rivales Fox News y MSNBC, que la superaban en audiencia, organizando el primer debate entre el demócrata Joe Biden y el republicano Donald Trump, el 27 de junio.