Los agujeros negros fascinan a gran parte de la comunidad científica, ya que son regiones espacio-temporales en donde la fuerza gravitatoria que poseen no deja escapar ni siquiera la luz.
A siglos de su desarrollo, un nuevo estudio podría poner en jaque la teoría de la relatividad propuesta por Albert Einstein, ya que afirma que la luz pura "nunca podría alcanzar el umbral de energía necesario" para formar las estrellas oscuras.
La teoría de la relatividad del físico es considerada por muchos como una base fundamental para entender cómo funcionan los agujeros negros.
En ella se segura que la gravedad no es simplemente una fuerza entre masas, sino una manifestación de la relación entre el espacio y el tiempo curvado por la presencia además de energía.
Las curvaturas son más pronunciadas en regiones con mayor densidad, como es el caso de las estrellas gigantes en sus últimos años de vida previo a que muerte.
El concepto más importante de la teoría es el horizonte de eventos, el cual afirma que una vez que la luz cruza el límite queda atrapado para siempre. Además, también explica que en el centro de los agujeros negros las leyes físicas conocidas dejan de aplicarse por la densidad infinita.
Una reciente investigación afirma que es imposible que los agujeros negros formados solo con luz existan en el universo, lo que contrarresta la teoría de la relatividad de Albert Einstein.
La nueva hipótesis fue creada por José Polo-Gómez, físico de la Universidad de Waterloo y Álvaro Álvarez-Domínguez, profesor del Instituto de Física de Partículas y Cosmos de la Universidad Complutense de Madrid.
Los especialistas sugieren que los agujeros negros se crean a partir de un "kugelbitz", lo que en alemán significa "rayo en forma de bola". En lugar de formarse por el colapso de materia ordinaria (protones, neutrones y electrones) se crea por la concentración de enormes cantidades de radiación electromagnética, explico Polo-Gómez a Live Science.
"Cuando hay una energía electromagnética increíblemente intensa, por ejemplo, debido a enormes concentraciones de luz, parte de esta energía se transforma en materia en forma de pares electrón-positrón", explicó Álvarez-Domínguez.
Además, mencionó que es un efecto cuántico llamado efecto Schwinger, también conocido como polarización del vacío. Esto significa que, incluso en las circunstancias más extremas, la luz pura nunca podrá alcanzar la energía necesaria para formar una estrella oscura.
"Lo que demostramos es que los kugelblitze son imposibles de formar mediante la concentración de luz, ya sea artificialmente en el laboratorio o en escenarios astrofísicos naturales", afirmó Luis Garay del Instituto de Física de Partículas y Cosmos de la Universidad Complutense de Madrid.