El centrocampista francés fijo que Lamine “tenía que demostrar más” si quería jugar la final
Lamine Yamal estaba haciendo una Eurocopa fantástica con sus asistencias y con lo que condiciona a los rivales, que suelen poner a varios jugadores para ayudar al lateral. Pero Rabiot, el veterano centrocampista de Francia, presionó al chaval antes de las semifinales. “Si Yamal quiere jugar una final tiene que demostrar más cosas de las que ha hecho”, dijo. Y el extremo de la selección española le hizo caso. El equipo galo se había adelantado en el partido por medio de Kolo Muani y poco después Lamine tenía la pelota en el borde del área, se hizo hueco y con sutileza la colocó pegada al palo con su zurda, imposible para Maignan, el portero que en toda la competición sólo había encajado un gol (sin contar la tanda), además de penalti, de Lewandowski.
El karma o lo que sea quiso que el que viera en primera persona la jugada fuera el propio Rabiot, el futbolista que tenía que taparlo. Con ese tanto, Lamine Yamal se convierte en el futbolista más joven de la historia que marca un gol en una Eurocopa, con 16 años, 11 meses y 16 días.
El tanto del jugador del Barcelona, además, recordó a otro que había marcado también a Francia, pero con la sub 17, en mayo del año pasado.
También eran las semifinales de la categoría. En aquella ocasión supuso el 0-1 para España, pero los franceses terminaron imponiéndose 1-3. Esta semifinal no ha acabado y va 2-1 para la Roja, tras el tanto en propia puerta de Koundé. Queda toda la segunda parte.
