En pleno verano, con las temperaturas elevadas, muchos sienten la necesidad de escapar de la ciudad, dejando atrás el calor del asfalto para buscar espacios más frescos donde disfrutar del fin de semana, especialmente si las vacaciones aún están lejos. Aunque España cuenta con 8.000 kilómetros de costa, no todos tienen la suerte de tenerla cerca. La acción automática de ponerse el bañador y caminar con la toalla al hombro hasta la playa no es tan simple para todos.
Si bañarte en agua salada no es una prioridad, a solo dos horas y media de Madrid se encuentra un verdadero tesoro natural: la reserva de Las Lagunas de Ruidera, situada entre Albacete y Ciudad Real en Castilla-La Mancha. Este paraíso está compuesto por 16 lagunas "de una belleza excepcional, distribuidas a lo largo del Valle del Río Pinilla. Estas lagunas están separadas y a la vez conectadas por barreras de formación tobácea, que crean cascadas y arroyos enlazando cada laguna superior con la siguiente", según se describe en la web de Áreas Protegidas de Castilla-La Mancha.
Lo que hace única a esta reserva natural son sus barreras tobáceas, que se forman cuando el agua de las lagunas fluye por el valle, depositando carbonato cálcico proveniente de las aguas de lluvia recogidas por el acuífero y liberadas a través de la roca caliza. Solo en la región de Karts, en Croacia, se encuentran formaciones similares, como las del Parque Nacional de Plitvice, declarado Patrimonio de la Humanidad. Estas formaciones están mejor conservadas que las de Ruidera, ya que la zona croata ha tenido menos actividad humana desde la Prehistoria, siendo una región menos árida.
El parque no se limita a estas rutas; hay otras sendas señalizadas con distintas longitudes y niveles de dificultad, generalmente accesibles para casi todos y especialmente recomendables para familias con niños. Para recorrer esta reserva natural de extremo a extremo, se necesitarán aproximadamente tres horas.
Si planeas visitarlas, es recomendable descargar la aplicación oficial de esta reserva natural. En ella encontrarás información útil, como audioguías, mapas y las normas que debes seguir en este espacio único de la Península Ibérica que debemos proteger, ya que sus ecosistemas son extremadamente delicados.
Las Lagunas de Ruidera representan un verdadero oasis natural en el Campo de Montiel, con sitios que no puedes dejar de visitar si decides explorar la zona, como la cueva de Montesinos. En su interior, Miguel de Cervantes describe una serie de visiones fantásticas de Don Quijote, en las que Montesinos le revela secretos del subsuelo. Para acceder a la cueva, es necesario coordinar la visita con una de las empresas autorizadas, cuya lista está disponible en el Centro de Recepción del Parque.
Durante los meses de verano, julio y agosto, el Parque ofrece un servicio gratuito de autobuses que realiza un recorrido circular por las lagunas, restaurantes y hoteles de la zona. Además, se organizan diversas actividades interesantes que vale la pena aprovechar si estás en las Lagunas.
