Investigadores descubrieron que estos animales pueden moverse sin tocar el suelo, por lo que simulan estar volando, a pesar de no saber nadar ni respirar bajo el agua.
En un hallazgo sorprendente, investigadores del Royal Veterinary College (RVC) de North Mymms han descubierto que los hipopótamos, conocidos por su imponente tamaño y peso, pueden elevarse en el aire al correr. Este fenómeno, observado a través de un minucioso análisis de imágenes, revela una capacidad desconocida hasta ahora en estos animales.
El estudio, dirigido por el catedrático de Biomecánica Evolutiva, John Hutchinson, muestra que los hipopótamos pueden levantar las cuatro patas del suelo simultáneamente durante aproximadamente el 15% del tiempo que están en movimiento, lo que equivale a unos 0,3 segundos. Esta habilidad se manifiesta especialmente cuando necesitan acelerar, ya sea para escapar de una amenaza o para perseguir a rivales.
A pesar de su colosal peso, que supera los 1.500 kilos, los hipopótamos son capaces de realizar esta maniobra, lo que ha dejado perpleja a la comunidad científica. Este descubrimiento se ha documentado en varios videos que muestran a manadas de hipopótamos correteando y levantándose brevemente del suelo.
Esta es una capacidad que ha generado mucho impacto entre la comunidad científica, pues eso demuestra que serían los únicos mamíferos enormes con la capacidad de elevarse, aunque sea por un corto tiempo, en el aire. Lo más cercano a ello sería el elefante, pero incluso este necesita tener una apta en el suelo para mantener el equilibrio.
Este hallazgo no solo añade una nueva dimensión a nuestra comprensión de estos animales, sino que también podría tener implicaciones significativas en el estudio de la evolución de la locomoción desde los dinosaurios hasta los mamíferos actuales. Los investigadores del RVC sugieren que esta capacidad podría ofrecer pistas sobre cómo se desarrollaron las habilidades locomotoras en distintas especies a lo largo de millones de años.
Tras este hallazgo, los especialistas indicaron que sería de mucha utilidad para cuidar mejor de esta especie en cautiverio, pues da una percepción detallada de su locomoción y de las habilidades que posee.
"Entender más sobre las especies con las que trabajamos solo nos ayudará a mejorar los cuidados que podemos darles en el futuro", dijo una de las investigadoras.
Los hipopótamos no pueden nadar ni respirar bajo el agua y, a diferencia de muchos otros mamíferos, son tan pesados que no flotan. En lugar de eso, caminan o corren por el fondo del río. Sus ojos y fosas nasales están situados en la parte superior de la cabeza, lo que les permite ver y respirar mientras están sumergidos. Cuando se sumergen por completo, cierran herméticamente sus oídos y fosas nasales para evitar que el agua entre, y pueden contener la respiración hasta por cinco minutos.
Durante el día, estos animales suelen dormir siestas en el agua. Tienen un reflejo subconsciente que les permite elevarse a la superficie para respirar sin despertarse, lo que les permite dormir sin riesgo de ahogarse. Al caer la noche, salen del agua para pastar y pueden consumir hasta 50 kilos de hierba cada noche.
