La segunda cabeza de serie femenina, Coco Gauff, se despidió del torneo después de un desafiante partido de cuarta ronda contra la cabeza de serie número 19, Emma Navarro, en la Pista Central el pasado domingo. En un encuentro que destacó la imprevisibilidad del deporte, Gauff cayó en sets corridos, 6-4, 6-3. Gauff, de solo 20 años, mostró visiblemente su frustración y ansiedad a lo largo del partido, mientras el implacable golpe de derecha de Navarro la colocaba repetidamente a la defensiva.
La habitual compostura de Gauff se vio puesta a prueba mientras miraba con frecuencia hacia su box de jugadores, buscando orientación estratégica de su entrenador, Brad Gilbert. En un momento, se la pudo ver diciendo, “Dime algo”, una clara señal de su lucha por encontrar respuestas en la cancha.
A pesar de sus esfuerzos, Gauff no pudo cambiar el impulso del partido. Navarro, por otro lado, mostró una notable calma y ganó confianza a medida que el partido avanzaba. Aprovechó los errores poco característicos de Gauff y pareció prosperar bajo la presión, plenamente consciente de lo que estaba en juego. La actitud tranquila y compuesta de Navarro contrastaba marcadamente con la visible frustración de Gauff, subrayando la fortaleza mental requerida a este nivel de competencia.
La victoria de Navarro marcó su primer triunfo sobre una oponente del top cinco, impulsándola a los cuartos de final, donde se enfrentará a la cabeza de serie número 7, Jasmine Paolini, el martes. Reflexionando sobre su desempeño en una entrevista con Mary Joe Fernández de ABC, Navarro dijo: “Definitivamente la vi frustrada y mirando a su box. En tiempos difíciles, uno usa cualquier cosa para darse un poco de impulso. Tal vez verla me ayudó un poco y me dio confianza.”
Navarro, de 23 años, está compitiendo en su segundo torneo de Wimbledon. Ya ha dado pasos significativos en su carrera tenística, habiendo ganado el campeonato individual femenino de la NCAA en su primer año en Virginia en 2021. Su juego disciplinado y el uso estratégico de su poderoso golpe de derecha contra Gauff demostraron su potencial para ser una contendiente formidable en las canchas de césped de Wimbledon.
La salida de Gauff es particularmente notable dado su reciente ascenso en el mundo del tenis. Después de ganar el Abierto de EE.UU. el año pasado y alcanzar las semifinales en el Abierto de Francia de este año, las expectativas eran altas para su desempeño en Wimbledon. El All England Club sigue siendo el único Grand Slam donde aún no ha alcanzado los cuartos de final, añadiendo otra capa de complejidad a su búsqueda de excelencia tenística.
Mientras Gauff procesa este revés, probablemente reflexionará sobre las lecciones aprendidas de este partido. Su camino en el tenis está lejos de terminar, y cada experiencia contribuye a su crecimiento como jugadora. Mientras tanto, el triunfo de Navarro es un testimonio del espíritu competitivo y la imprevisibilidad inherente en el deporte, prometiendo un emocionante enfrentamiento en los cuartos de final y sugiriendo sus potenciales éxitos futuros.
