Bombazo histórico y sorpresa excepcional, la más grande de la historia política de la V República. Según las primeras estimaciones oficiosas, el Nuevo Frente Popular (NFP), que agrupa a todas las izquierdas , habría ganado las elecciones generales anticipadas. Según las estimaciones oficiosas publicadas por el matutino conservador 'Le Figaro', Nuevo Frente Popular (NFP), que agrupa a La Francia Insumisa (LFI, extrema izquierda), PS, PCF y Verdes, habría conseguido entre 180 y 215 diputados, convirtiéndose en la primera fuerza política parlamentaria. Se trata de una mayoría simple, pero real. Sorpresa inmensa e inesperada. Según la misma fuente, Agrupación Nacional (AN, extrema derecha), el partido de Marine Le Pen, habría conseguido entre 120 y 150 escaños . Sería el primer partido y la segunda fuerza política nacional. Pero habría caído de manera espectacular, entre la primera y la segunda vuelta. Horizontes y Juntos, el partido y aliados de Emmanuel Macron , podrían conseguir entre 150 y 180 diputados. Una subida importante entre la primera y la segunda vuelta, convirtiéndose en una tercera fuerza bisagra, indispensable, quizá, para gobernar. Jean-Luc Mélenchon, presidente de LFI, fue el primer líder político en reaccionar, declarando: «Hemos alcanzado un resultado que decían imposible. Es un triunfo histórico. El primer ministro en funciones debe dimitir. El presidente Macron debe reconocer su inmenso fracaso y debe nombrar un jefe de gobierno del Nuevo Frente Popular, que es la fuerza política que debe gobernar en Francia». «Por nuestra parte», continuó Mélenchon, agregando: «Nosotros estamos dispuestos a gobernar. Seremos responsables. Cumpliremos nuestro programa. A partir de este verano, los precios quedarán bloqueados, suprimieron la reforma de las pensiones impuestas por Macron, se impondrá la jubilación a los 60 años, con un salario mínimo de 1.600 euros». En previsión de tensiones y violencias, en París, Marsella, Lyon, y otras capitales de provincias, el Ministerio del Interior ha ordenado una movilización excepcional de más de 30.000 policías , gendarmes y fuerzas anti disturbios, en estado de alerta máxima desde primeras horas de la noche del domingo. En París, se temen manifestaciones «imprevisibles» ante la Asamblea Nacional (AN), primera cámara del Parlamento nacional, en los Campos Elíseos y otras grandes avenidas de la capital, como la rue de Rivoli, donde los comerciantes han decidido cubrir sus escaparates con protecciones de hierro y madera, en previsión de posible destrozos y vandalismo.
