Los Juzgados de Plaza de Castilla de Madrid y toda la zona que los circunda, la plaza de las conocidas Torres Kío y alrededores, amanecieron este viernes con un despliegue de seguridad policial sin precedentes por la declaración de Begoña Gómez , esposa del presidente del Gobierno, como investigada ante el juez Juan Carlos Peinado, a las 10 de la mañana. A las 8 horas, 16 furgones de la Policía Nacional, las conocidas 'lecheras', inundaban el Paseo de la Castellana, la esquinas de Bravo Murillo y toda la plaza. Decenas de Policías de Seguridad Ciudadana vigilaban la zona. Una hora más tarde, las furgonetas ascendían a la treintena. Los efectivos policiales han obligado a la prensa (también más numerosa que ante cualquier otra citación judicial anterior) a situarse tras unas barreras metálicas a unos 25 metros de la puerta de los Juzgados, a pesar de que la mujer del presidente ha sido autorizada a acceder al edificio por el garaje, situado a la espalda de los Juzgados. La asociación Hazte Oír , entre las que ejercen la acusación popular, había convocado una manifestación frente a los Juzgados que no ha sido autorizada por la Delegación del Gobierno. Participantes en esta movilización han acudido con pancartas contra el presidente Pedro Sánchez sí consiguieron manifestarse en la plaza, pero la Policía les acotó a al menos 100 metros de los Juzgados. El despliegue de seguridad en los Juzgados de Madrid para la declaración de Begoña Gómez no tiene precedentes. Nunca antes hubo tantas decenas de Policías vigilando la zona ni se impidió a los periodistas estar a las puertas del Juzgado. Por parte de la acusación popular que ejerce Vox en la causa que se sigue contra Begoña Gómez, el eurodiputado y coordinador Nacional Jurídico de Vox, Jorge Buxadé , intentará entrar a Sala durante las declaraciones de la mujer del presidente, pero habrá que ver si el juez se lo permitirá.
