Gibraltar está con los ojos puestos en Reino Unido. Pendientes de lo que pase en la Cámara de los Comunes con estas elecciones en las que no pueden votar. El futuro del Brexit, las negociaciones con Europa y su relación con España dependerán del resultado de estas elecciones, pero ellos no pueden participar por ser territorio de ultramar. No tienen ese derecho. Los diputados que salgan este jueves de las 650 circunscripciones parlamentarias elegirán al Primer Ministro, que las encuestas dictan que será laborista después de 14 años de mayoría conservadora. Sin embargo, Gibraltar tiene jurisdicción propia. Eso quiere decir que no tiene circunscripción. Los catorce territorios británicos de ultramar tienen parlamento y gobierno propio. No son administrados directamente por el Reino Unido. La metrópolis solo se ocupa en estas zonas de la protección de defensa y de las relaciones de exteriores. Son súbditos de Carlos III, pero no los gobierna Londres . Gibraltar tiene un alto grado de autonomía. No tampoco están representados en la Cámara de los Comunes, ya que tienen su propio parlamento. Pese a que no pueden participar, los 'llanitos' se juegan en estas elecciones un cambio en las negociaciones sobre su relación con Europa y, por tanto, con sus vecinos de España. Algo que afecta a más de 15.000 trabajadores transfronterizos. Estos son españoles y tampoco podrán votar. Todo apunta a que el conservador Rishi Sunak no será el que mañana se levante con disposición de volver a ocupar el 10 de Downing Street. Por consiguiente, David Cameron , que está al frente de esa negociación sería sustituido por otro mandatario de la confianza del nuevo Primer Ministro. José Manuel Albares, ministro de Exteriores de España, tendrá otro interlocutor. Pedro Sánchez ya anunció en el Congreso de los Diputados que el acuerdo con Reino Unido «estaba cerca» . Lo mismo que dijo Albares en mayo tras la última reunión fallida. Ahora habrá que ver cómo es la visión del nuevo gobierno, que las encuestas apuntan a que será del Partido Laborista por una amplia mayoría. Si la rotunda victoria se concreta, Fabián Picardo debería ganar sintonía con el nuevo ocupante de Downing Street por ser del mismo partido. Igual que Pedro Sánchez, ya que Keir Starmer es de la misma cuerda ideológica, salvando las distancias y concreciones nacionales, que el presidente de España. Habrá que esperar a ver si hay nuevo gobierno y si éste propone cambios en la n egociación a la Unión Europea . Por ejemplo, en relación de aquellas fronteras como la de Irlanda o Gibraltar. Y si la Unión Europea está dispuesta a asumir esos cambios y pretensiones. Un acuerdo que tiene pendiente también a toda la comarca del Campo de Gibraltar por su impacto económico y estratégico. Los laboristas ya tranquilizaron diciendo que sería uno de los asuntos a abordar, pero todo está por ver una vez que se concrete el gobierno que salga de las urnas este jueves y que n o será votado por los británicos de Gibraltar .