En el mundo laboral actual, es muy importante la existencia de un entorno de trabajo saludable. Esto no solo implica seguridad física, sino también un ambiente psicológicamente positivo y estimulante.
Un ambiente laboral sano puede afectar de manera significativa la productividad de los empleados. Cuando estos se sienten valorados, respetados y seguros, es más probable que estén motivados para realizar su trabajo de la mejor manera posible. Así se puede lograr una mayor eficiencia, menos errores y, en última instancia, un mejor rendimiento general de la empresa.
Cuáles son los 7 trabajos más infelices según Harvard. (Freepik)
Según un estudio realizado por la Universidad de Harvard, más del 40% de las personas experimentan infelicidad en su lugar de trabajo. La investigación reveló cuáles son las profesiones que más generan sentimientos negativos y exploró las razones detrás de este descontento.
Los resultados mostraron que ciertas ocupaciones están más asociadas con altos niveles de estrés, ambientes laborales tóxicos o carencia de oportunidades de desarrollo personal y profesional.
Además, se identificaron factores que llevan a la infelicidad laboral, como la falta de equilibrio entre la vida personal y profesional, el salario insuficiente, la falta de apoyo por parte de los jefes, y la percepción de falta de propósito o significado en el trabajo diario.
Los 7 trabajos más infelices son:
Jornadas laborales de cuatro días a la semana, 30 horas, periodos de mayor dedicación intercalados con periodos más tranquilos, son algunos de los caminos ya adoptados por algunas empresas. (Freepik)
Para combatir el malestar de los empleados, algunas empresas invirtieron en conferencias, aplicaciones y terapias online. Aunque esto es positivo, puede no ser suficiente.
Si bien la mayoría de las ocupaciones dependen del tiempo, muchas otras pueden ser más flexibles. Así, los trabajadores podrían ajustar los horarios de acuerdo a su rutina, lo que traería beneficios para su salud y productividad.
Una reducción de la jornada laboral podría mejorar la salud mental de la población. Para muchos, la sociedad moderna trata las emociones en busca de aliviar los síntomas, en lugar de invertir en cambios sociales que podrían prevenir el sufrimiento y los trastornos mentales, como mejores trabajos y salarios y más tiempo libre.
La obsesión de las empresas por crear personas más productivas, en detrimento de la felicidad y el bienestar, puede estar en la raíz del creciente número de personas con problemas de salud mental, como depresión, ansiedad y burnout.
