Tras vencer el domingo en la ronda inicial de las legislativas, con un 33 por ciento de los votos, el partido identificado con la extrema derecha, Agrupación Nacional, aspira a conseguir en el balotaje la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional
La varias veces candidata presidencial Marine Le Pen afirmó hoy que Agrupación Nacional (RN), partido identificado con la extrema derecha, está listo para gobernar Francia si logra la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional, reporta Prensa Latina.
La política de 55 años, derrotada en los balotajes de las presidenciales de 2017 y 2022 por Emmanuel Macron, adelantó a la cadena France Inter algunos puntos de la eventual gestión de la fuerza ganadora el domingo de la primera ronda de los comicios legislativos, que tendrán la segunda en apenas cinco días.
Nuestro gobierno será completo y competente, con persona de RN, otras que nos han apoyado y de la sociedad civil, dijo la diputada de la disuelta Asamblea, quien aseveró no tener aspiraciones a cargos, solo dirigir al grupo parlamentario de la organización en la cámara baja, la mismo responsabilidad que ocupaba. El partido heredero del ultraderechista Frente Nacional, fundado por su padre Jean-Marie Le Pen, ya nominó para el puesto de primer ministro a Jordan Bardella, su actual presidente y cabeza de lista en las europeas dominadas por esta fuerza el 9 de junio.
Tras vencer el domingo en la ronda inicial de las legislativas, con un 33 por ciento de los votos, RN aspira a conseguir en el balotaje la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional, al menos 289 de sus 577 escaños, lo que obligaría a Macron a designar a Bardella como primer ministro, en una cohabitación política que sería bien incómoda para el oficialismo.
El bloque de izquierda Nuevo Frente Popular, la coalición gobernante Juntos, segundo y tercera en las urnas hace dos días, respectivamente, y diversos sectores de la sociedad han llamado a impedir la llegada al poder de la extrema derecha.
Según Le Pen, RN entraría en el poder solo si puede gobernar con su programa, al que una parte de Francia acusa de racista, anti-inmigrante y antieuropeo, pero otra ve en el mismo el remedio para males como la pérdida de poder adquisitivo ante la inflación y frente a la inseguridad.
Asimismo, la dirigente acusó a Macron de perfilar un «golpe de Estado administrativo», con el propósito de obstaculizar la eventual cohabitación con Bardella.
Al respecto, aseguró tener información de que el mandatario pretende realizar nominaciones mañana en puestos como la jefatura de la Policía Nacional y la Gendarmería.
