Leroy Sané o Florian Wirtz. Esa es la cuestión, la única duda que mantiene Jules Nagelsmann de cara al duelo de cuartos de final de la Eurocopa que enfrenta a la anfitriona con España, este viernes en Stuttgart. El extremo del Bayern de Múnich comenzó en el banquillo en los tres partidos de la fase de grupos, pero en el cruce de octavos ante Dinamarca entró en el once inicial en detrimento del emergente futbolista del Bayer Leverkusen. Sané fue, precisamente, el encargado de comparecer este martes ante los periodistas en el cuartel general de la 'Mannschaft' en Herzogenaurach, cerca de Núremberg y epicentro del emporio Adidas. Dejó patente la bala de Essen, en Renania, que los germanos le tienen ganas a España y no olvidan la humillación de La Roja en el memorable set en blanco de 2020 en La Cartuja de Sevilla, correspondiente a la Liga de Naciones. Claro que entonces a la selección nacional la conducía Luis Enrique y a la teutona Joachim Löw. ¿Sentimiento de revancha?, se le preguntó. «Queremos ganar para seguir haciendo historia en el torneo. Es verdad que nos ganaron, o más bien nos humillaron, que aquel 6-0 que nos dolió mucho, pero eso es agua pasada», respondió. Sané es de los convencidos de que con Toni Kroos todo ha cambiado y que ahora la 'Mannschaft' puede «herir» a España. «Antes no éramos suficientemente estables, era una gran debilidad nuestra. Toni ha alejado ese problema con la calma que aporta. Ahora las cosas van bien y estamos felices de que haya vuelto y de que nos haya hecho más fuertes», valoró antes de ofrecer algunas de las claves para alcanzar el éxito en este duelo cumbre. «Ellos (España) saben cómo presionar arriba, pero dejan atrás espacios que podemos explotar. Atrás, es crucial ayudar a nuestros defensas y evitar los uno contra uno. Sé que tengo fama de no trabajar mucho atrás, pero eso ha cambiado totalmente. Necesitamos no conceder gol». Con Inglaterra, Francia y Portugal sufriendo más de la cuenta pese a alcanzar los cuartos de final, España ha emergido junto a Alemania como las dos grandes favoritas al título. Asumen los germanos que La Roja es el único equipo que ha ganado sus cuatro partidos y está en plena forma, tras haber anotado nueve goles y encajado solo uno y en propia meta, el de Robin Le Normand que alimentó de manera fugaz el sueño georgiano. «Es cierto que ambas selecciones hemos jugado el mejor fútbol del torneo. Seguro que es un partido que desean ver todos los seguidores del mundo. Para poder dañar a los españoles, es preciso mantener el control, nuestro ritmo de juego». Sané reconoció estar enamorado del juego de Lamine Yamal , el adolescente del torneo y mundialmente reconocido y alabado. «Es impresionante cómo Lamine juega al fútbol con solo 16 años. Tengo muchas ganas de enfrentarme a él, creo que nuestro estilo es parecido». En cuanto a la pura actualidad deportiva, el centrocampista Emre Can fue el único de los 26 jugadores de Alemania que no entrenó el martes, pero la federación precisó que su ausencia fue por precaución. Antonio Rüdiger, Manuel Neuer y Pascal Gross completaron la sesión preparatoria pese a arrastrar pequeñas molestias físicas.
