La selección española inicia hoy su camino hacia los Juegos Olímpicos de París , una cita que le ha encumbrado al olimpo del baloncesto y que lleva sin perderse desde Atlanta 1996. Dos platas y un bronce después, España debe ganarse su plaza en la capital francesa en un Preolímpico de máxima exigencia que no permite la equivocación. La primera fase consta de dos partidos, este martes ante Líbano y el miércoles frente a Angola (ambos a las 20.30). Para mantenerse en la pelea, el combinado nacional tiene que no ocupar la última plaza de este minigrupo, para así clasificarse a las semifinales, en las que se cruzará con Finlandia, Polonia o Bahamas, y una posterior final. De estas seis selecciones, únicamente una obtendrá el billete olímpico. Para ello, los 12 hombres elegidos por Scariolo han sido Lorenzo Brown , Juan Núñez, Alberto Díaz, Sergio Llull, Darío Brizuela, Rudy Fernández, Xabi López-Aróstegui, Juancho Hernangómez, Jaime Pradilla, Santi Aldama, Usman Garuba y Willy Hernangómez. Con la baja de última hora de Álex Abrines, debido a pequeña rotura fibrilar, la selección deberá recuperar en Valencia el gen competitivo que parece haberse extraviado con la crisis reciente de resultados. Liderada por muchos de los nombres que se proclamaron campeones de Europa hace menos de dos años, España afronta el Preolímpico, un torneo sin margen de error y sin honores pero con un premio mayúsculo.
