Durante el juicio oral contra Keiko Fujimori, un pequeño perrito interrumpió las diligencias, convirtiéndose en el centro de atención y generando una ola de comentarios en las redes sociales.
Un curioso incidente tuvo lugar durante el juicio oral contra Keiko Fujimori, la lideresa de Fuerza Popular. Un pequeño perrito interrumpió las diligencias, convirtiéndose rápidamente en el centro de atención y provocó las bromas en las redes sociales.
Desde las 9:00 a. m. se llevaron a cabo las diligencias de acreditación de las partes, previo a la instalación de la sala y el inicio del juicio oral contra Fujimori Higuchi y más de 40 involucrados. Este proceso se centró en la acusación de presuntos delitos de crimen organizado y lavado de activos, relacionados con el caso conocido como 'Cócteles'.
El fiscal José Domingo Pérez solicitó penas de hasta más de 30 años de prisión a la hija de Alberto Fujimori y los demás implicados. Los cargos incluyen organización criminal y lavado de activos, entre otros delitos. Este caso ha captado la atención del público y de los medios debido a su magnitud y a las figuras involucradas.
Durante las diligencias, los ladridos de un perrito sorprendieron a las juezas y a todos los presentes. Este incidente, que en cualquier otra circunstancia podría haber sido visto como una distracción, se convirtió en un momento de diversión en medio de un juicio tenso.
Las redes sociales no tardaron en reaccionar. Usuarios en Twitter comenzaron a bromear sobre la intervención del peludito, algunos incluso lo apodaron "el abogado de Keiko". Los comentarios humorísticos inundaron las redes sociales y mostraron una vez más cómo un incidente inesperado puede capturar la imaginación del público.
Keiko Fujimori es la hija del exmandatario Alberto Fujimori y ha sido una figura prominente en la política peruana. Además de su carrera política, también es conocida por su relación con Mark Vito, de quien es exesposa. Este juicio es uno de los muchos desafíos legales que ha enfrentado en su carrera.
Aunque la interrupción del perrito no afectó significativamente el curso del juicio, sí proporcionó un momento de humor y distracción para todos los involucrados. Las juezas y los abogados retomaron rápidamente sus roles, pero el incidente quedó marcado en la memoria de todos los presentes.
