La semana pasada tuve el privilegio de asistir a la Cumbre de Monterrey de Comunicación Política 2024, un evento internacional que congrega a políticos, periodistas, funcionarios, legisladores, académicos, profesionales, consultores, empresas, medios de comunicación y estudiantes de todas partes del mundo. Esta cumbre se ha consolidado como un referente en el ámbito de la comunicación política, destacándose por la calidad de sus contenidos y la presentación de casos exitosos de diferentes partes del mundo
El evento se centró en seis grandes temas: campañas electorales, política y nuevas tecnologías, comunicación gubernamental, medios y opinión pública, mujer y política, y jóvenes y política. Dentro de estos ejes, se abordaron microtemas a través de mesas de debate, paneles y talleres. Estos incluían estrategias de comunicación para gobiernos, storytelling, comunicación persuasiva, microtargeting, publicidad política, marketing político, y más. Cada sesión ofreció una perspectiva única y enriquecedora sobre cómo manejar la comunicación política en el mundo moderno.
A lo largo de la cumbre, se presentaron diversas sesiones y paneles que capturaron la atención de los asistentes. Algunos de los más destacados fueron: desmitificando la escucha social con inteligencia electoral. Esta presentación abordó los mitos y realidades de la escucha social en el contexto electoral, destacando la importancia de entender los datos más allá de su superficie, y considerar el contexto y la narrativa detrás de las palabras.
La campaña termina, la creatividad y la comunicación deben ser permanentes, Memo Quintana de México enfatizó la necesidad de mantener la creatividad y la comunicación activa, incluso después de que la campaña electoral ha terminado, subrayando la importancia de una estrategia continua para el éxito a largo plazo.
El poder de la oratoria política, presentada por Eduardo Aucalla, de Perú, ofreció una fascinante sesión sobre el impacto de la oratoria en la política, proporcionando técnicas y estrategias para mejorar la comunicación verbal y no verbal en contextos políticos, comunicación política e inteligencia artificial. Por su parte, Luis Barroso Denis, de España, presentó un análisis sobre cómo la inteligencia artificial está transformando la comunicación política, ofreciendo tanto desafíos como oportunidades para los estrategas políticos.
Entre las presentaciones más inspiradoras se encontró la de Daniel Ivoskus, de Argentina, presidente de la Cumbre, quien comparó el pensamiento estratégico en la política, con el de un alpinista que siempre busca alcanzar la cima. También Clara Villarreal de México instó a los asistentes a hacer que sus esfuerzos valgan la pena, destacando la importancia del compromiso y la dedicación en cada acción política.
Jorge Sánchez, de Metrics, habló sobre la transformación digital y el uso de la ciencia de datos en la comunicación política. Esta temática resonó profundamente en la cumbre por el poder de los datos para influir en las decisiones políticas y gubernamentales, Sánchez también destacó en su ponencia la importancia de la inteligencia electoral, desmitificando varios conceptos erróneos que proporciona el social listening, ofreciendo una opción más científica para abordar los retos de campañas electorales y gobiernos.
La Cumbre de Monterrey de Comunicación Política 2024 no solo fue un éxito en términos de asistencia y organización, sino también en la calidad y relevancia de sus contenidos. Los debates, paneles y talleres ofrecieron una visión completa y multifacética de los desafíos y oportunidades en la comunicación política contemporánea. Este evento no solo fortalece la red de profesionales en el campo, sino que también proporciona las herramientas y el conocimiento necesario para enfrentar el futuro con confianza y creatividad.
Agradezco a los organizadores de la Cumbre de Monterrey la invitación, su dedicación y esfuerzo en la creación de un evento tan significativo y enriquecedor. Espero con ansias la próxima edición y las nuevas oportunidades de aprendizaje y colaboración que traerá a la industria.