Que la situación de escasez de vivienda en España es un problema es un consenso entre los expertos. En concreto, según el Banco de España, se necesitarían 600.000 nuevas viviendas hasta 2024 para cubrir el déficit. La alta demanda y la falta de oferta han derivado en un incremento de precio. Según pisos.com, en los primeros seis meses del año el precio de la vivienda ha subido un 6,71%, hasta alcanzar un precio medio de 2.305 euros por metro cuadrado. En términos interanuales, el aumento llega al 12,06%. El problema de acceso, según el Consenso Económico de PwC del segundo trimestre -un panel formado por empresarios, analistas, investigadores y representantes de asociaciones- es que no hay oferta. Lo aseguran el 77% de los entrevistados en la encuesta de la consultora. Pero, ¿por qué no hay oferta? Tal y como indican las principales conclusiones del panel la mala normativa, la especulación y la inseguridad jurídica . Así lo consideran el 48%, el 23% y el 16% de los encuestados, respectivamente. De hecho, desde la consultora especifican y dicen que la Ley de la Vivienda no ha tenido el resultado esperado porque sigue «protegiendo en exceso» el suelo disponible y que, hasta ahora, las medidas propuestas tienen carácter de medio plazo, «lo que no facilita para actuar sobre una situación de emergencia». El impacto, sin embargo, es desigual, y algunas regiones de nuestro país viven mayores aumentos de precio. En comparación con el semestre anterior Madrid (11,87%), Región de Murcia (8,94%) y Comunidad Valenciana (7,48%) arrojaron las subidas más pronunciadas; mientras que el único descenso fue el de Navarra (-2,32%). De un año a otro, la subida más marcada tuvo lugar en Madrid (20,64%). Además, la región más cara en junio de 2024 fue Baleares (4.392 €/m²) y la más barata Extremadura (833 €/m²). En cuanto a la distinción por capitales de provincia Madrid (26,85%), Valencia (19,61%) y Málaga (19,35%) fueron las capitales que más vieron incrementado su precio; mientras que las que más bajaron fueron Teruel (-8,09%), Ávila (-2,65%) y Pontevedra (-2,39%). La más cara fue San Sebastián (6.486 €/m²) y la más barata Jaén (1.149 €/m²). Pero, si hasta ahora la Ley de Vivienda no ha tenido el efecto esperado, ¿qué recomiendan los expertos? Según el informe elaborado por PwC, las medidas que sí se deberían tomar para elevar la oferta son: agilizar la concesión de licencias urbanísticas ( apuntan el 70 % de los encuestados), incrementar el volumen de suelo edificable (el 61 %) e incrementar la rehabilitación de viviendas (el 56 %). Además, cuando se les pregunta por las decisiones que el legislador podría tomar, el 72 % marcan 'fomentar la colaboración público-privada para la promoción del alquiler', seguido de 'impulsar la oferta de alquiler social', el 64 %, y redactar 'una nueva Ley del Suelo que mejore la gestión de los procesos administrativos sobre el suelo y el urbanismo', el 62 %. «La falta de vivienda es un problema tan grave y la construcción de pisos es un proceso tan lento, que supera los dos años, que la colaboración entre las Administraciones y los promotores privados parece la solución más eficiente», concluyen desde la consultora. La situación, explica el director de Estudios de pisos.com, Ferran Font, no cederá a no ser que «se acometan políticas estructurales que entiendan la vivienda como un desafío a largo plazo». «Regular con rigidez, penalizando la propiedad, lo único que consigue es desalentar y que se busquen subterfugios para esquivar la normativa», agrega. «Los precios no dan un paso atrás, animados ahora por el horizonte de una financiación hipotecaria más atractiva», comenta Font en referencia a la reciente bajada de tipos de interés del Banco Central Europeo. El 93% de los expertos piensan que el uso turístico de las viviendas es una de las posibles causas. Sin embargo, detallan, este problema sólo afecta a los centros de las capitales turísticas, no a los barrios del extrarradio de muchas ciudades que también sufren la falta de pisos para alquiler. La segunda opción más apoyada fue que no se arriendan pisos por «los mayores derechos de los inquilinos», con el 86 % de apoyo, mientras que el fenómeno de la ocupación aparecía en el 70 % de los apoyos.