Inglaterra está en los cuartos de final de la Eurocopa y a partir de ahora, puede pasar de todo. Principalmente porque por su lado del cuadro evita a las grandes potencias. Otra cosa es si esta Inglaterra es superior a algún equipo de la Eurocopa. Porque los inventores del fútbol tienen todo a favor, menos una cosa: a ellos mismos.
Inglaterra pasó de la fase de grupos con una victoria, dos empates y sólo dos goles y llega a los cuartos de final tras tener pie y medio fuera de la competición. Se salvó porque Bellingham se inventó un gol de medio chilena en el minuto 94. Un gol salvador y puede que algo más. Puede que haya cambiado el destino de los ingleses, que lo ven todo de cara para el duelo contra Suiza. Ahora más que nunca son bastante conscientes de que pueden ganar partidos sin más ideas que meter delanteros y colgar balones al área. El fútbol de toda la vida, el estilo inglés que la Premier ha dejado atrás. Supervivencia pura y dura, pero van tirando.
Por lo menos están en cuartos y Southgate ya ha evitado los afilados cuchillos de la prensa inglesa que le esperaban si hubiese tenido que regresar antes. Él y la lista de futbolistas con mucho nombre y pocas cosas que ofrecer en esta competición. Los memes en las redes ya estaban apuntando a Bellingham, tan decisivo en el Real Madrid y tan apagado durante el encuentro, hasta que se reencontró con su versión madridista. Estuvo en el área cuando tenía que estar y remató como ha rematado en LaLiga española. Hay un Balón de Oro en juego y los goles de chilena pueden valer doble.
Eslovaquia lamentó el tanto del empate, el que le llevaba a la prórroga y, más o menos todos los tenían claro, a la perdición. Tardó muy poco Kane, en un gol de cabeza tras un pase de cabeza, de poner a Inglaterra por delante. Eslovaquia lo había hecho bien hasta entonces, aunque se fue desinflando según pasaba la segunda parte.
Lo mejor de los eslovacos fue su comienzo, sin ningún respeto a Inglaterra, jugando con profundidad. Southgate presumía de defensa, quizá por presumir de algo, pero Eslovaquia le fue quitando razones. Tuvo varias ocasiones claras antes de marcar el tanto. Durante la primera parte, Inglaterra no tiró a puerta y dio la sensación de no saber muy bien qué hacer. Southgate puso de titular a Mainoo, para ver si cambiaba algo y no pasó nada.
Lo de Inglaterra es un problema general, que no se arregla con un cambio de nombres en el centro del campo. Sólo le funciona poner centros al área. Así encerró a Eslovaquia y ganó en la prórroga. Ahora, hasta puede soñar.
