El Real Madrid no ha conseguido el visto bueno de los vecinos del Santiago Bernabéu en el primer encuentro para resolver la crisis por el ruido en el estadio. Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del Club blanco, se reunió con los residentes de la zona para solicitar seis meses de cortesía mientras trabajan en sellar las 'grietas' y reducir las molestias. Los vecinos, por su parte, no salieron contentos de esa reunión , pues la agenda de conciertos seguirá con lo previsto. Tal y como indican los documentos a los que tuvo acceso este periódico, el Real Madrid trabaja en un «plan de control de emisiones sonoras». Este libreto incluye, entre otros aspectos, la «mejora del aislamiento de las zonas abiertas, especialmente el 'skywalk' –la parte más elevada–, el cuarto anfiteatro y los vomitorios de los fondos». Los macroeventos que tendrán lugar en el templo blanco deberán pasar un control previo para medir el comportamiento del sonido y se trabajará con los vecinos la regulación de horarios y movilidad. Así, el primer cara a cara tuvo lugar el viernes y estuvieron presentes también CEIM, el Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad de Madrid. En este encuentro, el exfutbolista del equipo blanco solicitó a los vecinos seis meses para que trabajen en el proyecto de insonorización del Santiago Bernabéu . Mientras tanto, más de una decena de conciertos –entre ellos cuatro fechas seguidas de la artista colombiana Karol G– y eventos multitudinarios tendrán lugar en este mismo espacio. «Se debería parar absolutamente todo hasta que esté insonorizado», determina a ABC Nicolás, vecino y administrador de Ruido Bernabéu, cuenta de X creada con ánimo de expresar su desacuerdo con el uso de este espacio como un «eventódromo». Nunca las relaciones entre el Real Madrid y los residentes de la zona del Bernabéu habían estado tan tensas. Aunque los conciertos de Taylor Swift celebrados el 29 y 30 de mayo representaron un punto de inflexión ante las numerosas denuncias que acabaron en sanción de 40.000 euros a la promotora del espectáculo, los vecinos de Chamartín llevaban alertando del problema semanas antes. Como medida preventiva ante esta situación, el club blanco ha contratado a la empresa de ingeniería Vanguardia, que ya está diseñando un «modelo de comportamiento acústico» en el que se detallarán las principales condiciones técnicas a las que se tendrán que adaptar todos los eventos que se celebren en el Bernabéu. Este sistema permitirá saber si lo que proponen los promotores de los conciertos cumpliría con la normativa vigente en función de las medidas de aislamiento implantadas en el estadio. Las administraciones, entre ellas el ayuntamiento de la capital y la Comunidad de Madrid también tendrán su lugar en una mesa de seguimiento, junto a vecinos y comerciantes afectados. En estas reuniones, tal y como se compromete el Real Madrid, también se discutirán todas las cuestiones que permitan «mejoras de la convivencia en el entorno». Entre ellas, la regulación de horarios de finalización de los conciertos y la realización de ensayos, así como la implantación de un plan de movilidad sostenible para cada evento.
