Michael Pirovolakis tiene paraplejía espástica tipo 50 (SPG50), un trastorno neurodegenerativo progresivo ultra raro que causa retrasos en el desarrollo, problemas del habla, convulsiones, parálisis progresiva de las cuatro extremidades y, por lo general, es fatal en la edad adulta. Unos 80 niños en todo el mundo están afectados por esta condición genética. En un intento por frenar la progresión de la enfermedad, en marzo de 2022 un equipo de investigación clínica del Hospital para Niños Enfermos (SickKids), en Canadá, administró la primera terapia genética en un solo paciente a Michael, menos de tres años después de su diagnóstico inicial . Cuando el pequeño recibió esta terapia personalizada, el curso de su patología cambió. Ahora, la revista 'Nature Medicine' acaba de publicar el innovador ensayo clínico, en el que se documenta la trayectoria de Michael en los 12 meses posteriores al procedimiento, junto con el novedoso impacto que este ensayo tiene para el futuro de la medicina genética en Canadá. La terapia génica consiste en introducir una copia sana de un gen en las células de una persona que tiene uno o más genes defectuosos . En el caso de Michael, el gen SPG50 está causado por dos variantes patógenas en un gen llamado AP4M1. El equipo de investigación clínica, dirigido por el doctor Jim Dowling, médico de planta de la División de Neurología y científico principal del programa de Genética y Biología del Genoma de SickKids, introdujo el gen AP4M1 sano en el líquido cefalorraquídeo de Michael, que transportó el gen directamente a las células nerviosas. «Si bien estas enfermedades ultra raras son únicas, nuestro flujo de trabajo proporciona una hoja de ruta para terapias genéticas que podrían ayudar a muchos de los miles de niños en Canadá con afecciones genéticas raras», afirma Dowling. Gracias a una colaboración multicéntrica con médicos y empresas de EE. UU. y Canadá para coordinar la investigación, el desarrollo y la fabricación de una terapia de reemplazo genético, el equipo pudo administrar el tratamiento de terapia genética a Michael dentro de los tres años siguientes al diagnóstico. En los 12 meses posteriores al tratamiento, Michael no experimentó efectos secundarios graves y, contrariamente a lo característico de las enfermedades neurodegenerativas como SPG50, su enfermedad no parece estar progresando más. Además, comenzó a mostrar posibles signos de mejora . Por primera vez, Michael pudo levantarse con los talones en el suelo y experimentó avances en algunos aspectos de su desarrollo neurológico. «Cuando nos enteramos de que a Michael le habían diagnosticado esta terrible enfermedad, nuestro mundo se derrumbó. Estábamos perdidos y destrozados como familia. Afortunadamente, teníamos un equipo increíble en SickKids y una comunidad que nos apoyaba y nos dio la confianza para recaudar millones de dólares y crear una terapia, no solo para Michael, sino para otros niños afectados por esta enfermedad durante las próximas generaciones», cuentan sus padres, Terry y Georgia. El ensayo proporciona evidencia inicial importante de la seguridad y eficacia de la terapia génica para reducir o detener la progresión de SPG50, mientras el equipo de investigación clínica sigue el progreso de Michael. Los resultados también destacan cómo se puede desarrollar una terapia génica de forma rápida y personalizada para pacientes individuales con enfermedades genéticas raras. Los autores esperan que este enfoque se pueda utilizar para otras enfermedades en el futuro en el contexto del 'Precision Child Health', un movimiento de SickKids para brindar atención individualizada a cada paciente. «Existen más de 10.000 enfermedades raras y la mayoría de ellas no tienen tratamiento. Estamos ofreciendo un modelo que, con la financiación y el apoyo adecuados, tiene el potencial de cambiar las vidas de los pacientes con enfermedades raras y de crear un futuro en el que todos los niños puedan beneficiarse de la medicina de precisión», afirma Dowling.