Llegó Vicky del Cerro a 'Pasapalabra' (Antena 3) muy pocos días después de la victoria de Óscar García y la marcha de Moisés Laguardia . A reyes 'muertos', reina puesta, pues esta licenciada en Informática –trabaja en la Universidad de Burgos– y madre de familia –tiene una hija que juega al baloncesto– demostró rápidamente que venía para quedarse. En su presentación, los espectadores de 'Pasapalabra' descubrieron que la nueva concursante es una apasionada de la música, tiene la carrera de piano y es fan del también burgalés Orestes Barbero . «Curiosamente, antes del programa, le veía muchísimas veces, pero no quería ser pesada como todo el mundo iba detrás de él. Desde que estoy aquí no le veo», cuenta en una entrevista para Antena 3. Tras haber cumplido más de un mes como concursante de 'Pasapalabra' , Vicky del Cerro ha hecho balance de su concurso. La informática asegura que siempre había sido seguidora del formato y que su único objetivo, una vez le cogieron en el 'casting', era superar la Silla Azul y estar una entrega. Vicky del Cerro no daba crédito a que encadenase una victoria tras otra. La concursante de 'Pasapalabra' sabía que, para entrar en el concurso, tenía que estudiar, así que aprovechó el confinamiento para tomárselo en serio y estudiar cualquier rato libre. «Yo intento estudiar todo lo que puedo; tengo una familia y un trabajo. Estoy en la carnicería y estoy estudiando. En vez de leer un libro me pongo a estudiar. Una vez estás dentro ya no puedes parar», cuenta ella. Asegura que jugar a El Rosco no es lo mismo desde casa que en plató: «Vas limando los pequeños defectos. Intentas hacerlo todo deprisa. Luego pausas. En cuanto a la mínima duda, dices 'Pasapalabra' . Sigues cometiendo fallos, pero vas cogiendo experiencia.... La calma». La burgalesa se deshace en elogios hacia su rival Manu, con quien, al igual que Óscar y Moisés , está muy igualada en cuanto a victorias: Nos llevamos muy bien. Pasamos mucho tiempo juntos. Fuera de plató hablamos de su carrera, de mi vida... Es un chaval muy majo, accesible, competitivo dentro de la prudencia y de que es un juego». Para ella, lo más complicado es el cambio de contraste durante la grabación de 'Pasapalabra' (se suelen rodar tres programas al día): «Yo soy muy de divertirme. En la mesa me río, pero luego ahí tienes que ponerte seria y concentrada. Esos altibajos son más complicados, pero los estoy llevando bien».