“Antes de dar comienzo al pleno voy a pedir que retiren la bandera porque nunca se ha puesto una bandera”. Con estas palabras del alcalde, Carlos Velázquez, arrancaba la sesión plenaria en el Ayuntamiento de Toledo, después de que el Grupo Municipal Socialista colocase una bandera LGTBI en parte reservada al grupo político en el salón de plenos.
La portavoz socialista Noelia de la Cruz pedía entonces la palabra para explicar que “el Grupo Socialista se ha visto obligado a poner esta bandera que nos representa a todos”, decía, y que “no lleva ninguna sigla política, al contrario es la bandera de la defensa de los derechos humanos”.
La portavoz socialista ha dicho que “es de justicia que esta bandera esté hoy en el salón de plenos”, cuando precisamente se celebra cada 28 de junio el Día Internacional del Orgullo LGBTI. Los socialistas respondían así a la negativa del Gobierno local de PP y Vox de colocar la bandera LGTBI, por segundo año consecutivo, en el balcón del Consistorio como venía siendo habitual en los últimos años.
“Me gustaría corregir al señor alcalde, en la pasada legislatura su grupo, el grupo popular, sí colocó banderas en su bancada y en ningún momento se obligó a que las retiraran”.
El alcalde volvía a pedir la retirada de la bandera. “Es una cuestión de urbanidad. Yo sé lo que ustedes quieren: que mañana vengan aquí otras personas y pongan otras banderas. Pero yo soy el responsable de llevar el orden en el pleno y sacar los asuntos con normalidad que es como vive la gente de la calle cualquier tipo de asunto, ruego de verdad que en aras a no buscar enfrentamiento o el lío por el lío, que retiren esa bandera”.
De la Cruz ha vuelto a pedir la palabra que le ha sido denegada. “Queda patente que manda la vicealcaldesa”, respondía la concejala socialista en alusión a Inés Cañizares, de Vox.
“No vamos a dar comienzo al pleno hasta que no retiren la bandera. Entiendo que ustedes no quieren debatir ni votar sobre una moción para garantizar todos los derechos del colectivo LGTBI o sobre modificaciones de crédito que afectan a obras importantísimas para la ciudad de Toledo”, entre otras cuestiones, continuaba el alcalde. Carlos Velázquez acusaba a los socialistas de “generar odio y enfrentamiento”.
El receso ha provocado también la suspensión de la retransmisión del pleno que el Ayuntamiento toledano pone a disposición de cualquier ciudadano a través de su canal de Youtube. Mientras tanto, un policía local ha procedido a retirar la bandera y se ha retomado la sesión plenaria.
El debate ha continuado después y el portavoz del Grupo Municipal Vox, Juan Marín, ha asegurado que “los homosexuales tienen reconocidos sus derechos como cualquier ciudadano”. Como en otras ocasiones, la formación de ultraderecha distingue entre derechos ciudadanos.
Marín dice que Vox es partidario de “colocar símbolos de apoyo” a víctimas de accidentes laborales o a mujeres que sufren violencia “porque esas personas sí necesitan el apoyo de las instituciones, porque están viviendo una situación que dificulta el ejercicio de sus derechos ciudadanos, o que limita sus capacidades”, pero en cambio considera que hacer lo propio con “los homosexuales” supondría “concederles un privilegio, no un derecho”, de ahí su negativa a colocar la bandera arcoíris en el Ayuntamiento de Toledo.
En este sentido ha negado que exista “discriminación hacia los homosexuales, que no son ni más ni menos que cualquier otra persona”.
Por su parte, la concejala del PP, Marisol Illescas criticaba después “la actitud” del grupo municipal socialista y de IU-Podemos ante una moción presentada ante el pleno “en la que se muestra el apoyo a la población LGTBI de Toledo”.
Ha defendido su intento de “llegar a un acuerdo para sacar adelante la propuesta a través de una transaccional” que ha sido rechazada y por eso cree que “su intención nunca ha sido lograr un acuerdo, tan solo utilizar al colectivo como arma arrojadiza sin importarles realmente el compromiso con la lucha contra la homofobia”.
“Desde el Grupo Municipal Popular denunciamos de manera explícita la homofobia, la lesbofobia, la bifobia y la transfobia, en especial la que se pueda producir en nuestra ciudad y ”mostramos en todo momento nuestro compromiso firme“ con la puesta en marcha de medidas para erradicar esta lacra social. Por lo tanto, ha insistido la concejal popular, ”es inadmisible que por no poner la bandera con los colores del arcoíris en el balcón del Ayuntamiento, algo que no ha sido aprobado por la Junta de portavoces, no apoyen una moción a favor de este colectivo“, criticaba.
“Nosotros atendemos sus demandas de verdad, de forma real y efectiva, no solo detrás de las pancartas”, zanjaba, tras pedir a los concejales del PSOE que “dejen de creerse los dueños de las políticas sociales, y de instrumentalizar a los diferentes colectivos”.
El concejal socialista Pedro Jesús López Argudo, ha sido el encargado de defender la moción presentada junto a IU-Podemos en defensa del colectivo LGTBI, con motivo del Día Internacional del Orgullo que se conmemora este 28 de junio.
“Quitar la bandera le ha retratado, quiere invisibilizar al colectivo”, le ha recriminado López al alcalde. “A las personas LGTBI nos ha costado mucho dar un paso hacia adelante para poder salir del armario, para sentirnos libres, para amar a quien queramos y vivir la vida que queremos, no le vamos a permitir ni a usted señor Velázquez, ni a la señora Cañizares, ni a nadie, que ahora nos quieran encerrar en un cajón”.
Según el socialista, el equipo de Gobierno de PP y Vox está “promocionando Toledo como una ciudad intolerante y retrógrada”, tal y como recoge Toledodiario.es.