Julian Assange, fundador de WikiLeaks, la plataforma conocida por destapar información confidencial y altamente clasificada, ha conseguido recuperar su libertad. A los 52 años, Assange puede finalmente retornar a Australia, su país natal, tras haber alcanzado un acuerdo con la administración estadounidense. Según el acuerdo, se declara culpable de un cargo de espionaje relacionado con la distribución ilegal de información sobre la seguridad nacional.