Vladimir Cerrón iba a ser capturado el pasado 15 de junio. El comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), Víctor Zanabria, informó que el prófugo, exgobernador regional de Junín y líder de Perú Libre, estuvo presente en la vivienda donde posteriormente se detuvo a José Bendezú, exsecretario de prensa del partido, entre el 12 y 13 de junio. La captura ocurrió en un operativo especial en Huancayo, coordinado entre la policía y el Ministerio Público.
"Las informaciones que obtuvimos y las corroboraciones de la fuente humana que recibimos nos confirmaron que estuvo en el lugar. Tanto es así que el requerimiento de medidas limitativas de derechos al juez en Junín era a nombre de Vladimir Cerrón y José Bendezú. Efectivamente, entre el 12 y 13 de junio, Vladimir Cerrón habría estado en la vivienda…" dijo en RPP.
Asimismo, Zanabria indicó que en la vivienda se pudo encontrar evidencia de la comunicación continua que tenía con Bendezú, como aparatos de comunicación y otros medios tecnológicos.
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El general PNP explicó que se han hallado pruebas en dispositivos electrónicos que confirman la presencia de Cerrón en la propiedad y evidencian una comunicación constante con Bendezú. "Los temas discutidos entre ambos incluían desde asuntos personales hasta estrategias para eludir la acción de la justicia", señaló Zanabria.
Según las autoridades, Cerrón y Bendezú habrían viajado juntos por varias ciudades del país en los últimos meses. Desde su condena en octubre del año pasado por corrupción, Cerrón ha permanecido prófugo, aunque activo en redes sociales, lo que ha generado especulaciones sobre su ubicación y actividades durante este tiempo.
No solamente de cuestiones personales o de acciones políticas, sino de acciones que hacen para ocultarse y cómo habrían estado realizando algunos desplazamientos desde algunas ciudades del país.
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Alejandro Sánchez Sánchez, propietario de la casa de Sarratea, regresó a Perú tras ser deportado de Estados Unidos. El Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción del Poder (Eficcop) gestionó su deportación en el marco de las investigaciones del caso 'Asesores en la sombra' y sus vínculos con el expresidente Pedro Castillo, con quien presuntamente habría orquestado una organización criminal.
El empresario deberá someterse al control de identidad ante el Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional de turno. Posteriormente, pasará por un examen de medicina legal, revisión de requisitorias y será puesto a disposición del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) para su ingreso a un centro penitenciario.
Una vez encarcelado, Sánchez Sánchez tendrá acceso a mecanismos legales como la colaboración eficaz, la conclusión anticipada del juicio o la confesión sincera, opciones que deberá considerar junto a su defensa.
