La edad de oro de España arrancó con un triunfo ante Italia a penaltis en la Eurocopa de 2008. Hasta ese día La Roja afrontaba sus duelos ante los azzurri con una sensación de clara inferioridad. Los aficionados admiraban en los rivales lo que no tenían sus jugadores, capacidad de competir y sacar adelante las situaciones más peliagudas, la gran especialidad de los transalpinos. La mirada de los hinchas en ha cambiado. Hasta ese título, España sólo había ganado a los azzurri una vez en partidos oficiales , en los Juegos de 1920. El balance en los demás encuentros era demoledor: cinco triunfos transalpinos y tres empates. Aunque Italia se ha impuesto en las dos últimas Eurocopas (en la última por penaltis en semifinales), los tiempos de bestia negra de los transalpinos han desaparecido. Desde aquel torneo en Austria y Suiza La Roja se ha agigantado y son los italianos los que se sienten en inferioridad ante ellos. El resumen de los últimos duelos es de cinco victorias españolas, dos empates y dos derrotas. Eso sí, nunca hay que fiarse de este rival. Los italianos fracasaron de forma estrepitosa al quedar fuera de los dos últimos Mundiales, pero en Alemania son los defensores del título . Ante este duro rival España busca entrar en otra órbita. Un triunfo le colocaría en octavos como cabeza de serie porque el primer criterio es el goal-average particular y convertiría el duelo ante Albania en una recompensa en forma de minutos de Luis de la Fuente a sus suplentes. El partido de Gelsenkirchen reúne a dos selecciones que llegan sin urgencias porque han cumplido con su papel en la primera jornada. Ambos ganaron, aunque de forma distinta. Los de Spalletti sufrieron lo indecible ante Albania. Todo lo contrario que España. Italia pisa al estadio del Schalke con piel de cordero y encendidos elogios a su rival. «España lo tiene todo. Es la mejor marca. Cualidades individuales y habilidades como equipo», lanzó Luciano Spalletti, que tiene a La Roja como una referencia de lo que quiere que sean los suyos. Más allá del 3-0, dio gusto ver el juego de La Roja ante Croacia. Un triunfo que define el radical cambio marcado por Luis de la Fuente en la selección . El equipo del tiqui-taca se ha transformado de la noche a la mañana en un grupo de juego más directo y vertical. El seleccionador italiano prepara a los suyos para encontrarse a una España que salga a morder. «Tengo curiosidad por ver qué pasará cuando intenten presionar con los once hombres empezando por el portero, qué decidiremos hacer y cómo responderemos. Vencieron a Croacia porque siempre presionaron al mismo ritmo», destacó. Los periodistas italianos especulaban ayer con que Cristante podrá acompañar a Jorginho en el centro para meter más cemento. Spalletti podría también retocar su once de cara a meter un perfil en el medio de jugadores que puedan contener el estilo del rival como el caso de Bryan Cristante que podría acompañar a Jorginho para poner más 'cemento' delante de la zaga donde la novedad podría ser Gianluca Mancini por Riccardo Calafiori. No se esperan cambios en el once de España . El partido ante Croacia anima al seleccionador a mantener el mismo. El estupendo rendimiento de Cucurella en el lateral izquierdo parece apuntar a que se mantendrá. Con Laporte recuperado de sus molestias musculares y en perfecto estado de revista, el seleccionador riojano tiene por primera vez a sus 26 jugadores a su disposición. Eso sí, pese a que insiste en mostrar una plena confianza en el central del Al-Nassr, Nacho se mantendrá como compañero de Le Normand en el eje de la defensa. De la Fuente quiere un equipo sin complejos para que seguir volando a por la cuarta Eurocopa.