El Tribunal Constitucional ha rechazado el recurso que Vox presentó contra la reforma de la ley del aborto de 2023, que entre otras cosas elimina la obligación de que las jóvenes de 16 y 17 años cuenten con el permiso paterno para abortar. El aval del tribunal de garantías, que ha salido adelante con el voto en contra de los cuatro magistrados conservadores del pleno, llega después de varias sentencias que han rechazado recursos contra la ley del aborto de 2010 y también contra la penalización del acoso a mujeres que acuden a una clínica a interrumpir su embarazo.
La reforma fue aprobada en el Congreso en febrero de 2023 con la oposición de PP y Vox. Una serie de cambios con respecto a la norma aprobada en la segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero que eliminaba la obligación de que las jóvenes de 16 y 17 años tuvieran que contar con el permiso de sus padres para abortar, pero también ponía otras medidas encima de la mesa.
Entre otras, abordó la salud menstrual, eliminó los tres días de reflexión y estipuló la creación de registros de objetores de conciencia con el objetivo de que las intervenciones sean asumidas mayoritariamente en centros de la sanidad pública.
Como en otros recursos relacionados con el derecho de las mujeres a interrumpir el embarazo, Vox planteaba que esta reforma legal atacaba derechos fundamentales a la igualdad y a la vida. Un argumento que el Constitucional ya rechazó cuando tumbó el recurso que presentó el PP hace más de una década contra la ley del aborto de 2010.
La decisión del tribunal de garantías ha salido adelante gracias a los siete votos de los integrantes del sector progresista del pleno, mientras que los cuatro conservadores han votado en contra. Los mismos que votaron en contra de la sentencia que avaló la ley del aborto de 2010 y en contra de la que avaló que el acoso a mujeres que abortan forme parte del Código Penal.