La Franja de Gaza vivió este domingo un día de relativa calma, después de que el ejército israelí anunciase una pausa en sus operaciones en una zona del enclave palestino sur de Gaza para permitir la entrada de más ayuda humanitaria en el territorio palestino.
La pausa “tendrá lugar de las 08H00 a las 19H00 (05H00 a 16H00 GMT) todos los días y hasta nuevo aviso”, en la zona que va desde Kerem Shalom, un paso fronterizo en el sur de Israel, a la carretera de Salahedin, en Gaza, y hacia el norte del territorio palestino, anunciaron las Fuerzas de Defensa israelíes.
El propio ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, dijo haberse sorprendido por el comunicado del portavoz militar, anunciando un alto el fuego en el corredor humanitario de Rafah durante gran parte de las horas del día.
Netanyahu no se pronunció al respecto y se ignora si conocía con anticipación la decisión, explicada por el ejército como una maniobra operativa, una decisión técnica.
En Gaza hay hambre, Egipto no permite el uso del cruce de Rafah mientras el lado de Gaza esté controlado por Israel, y Washington debió imponer sanciones contra una agrupación extremista israelí que procura impedir por la fuerza el paso de transportes provenientes de Jordania.
Las partes se acusan mutuamente de cumplir o no cumplir con los términos de una acuerdo destinado a poner fin a la guerra, a cambio de la liberación de todos los 120 secuestrados israelíes en manos de Hamas. En la última semana murieron en batalla 12 soldados israelíes y decenas de palestinos, combatientes y civiles. Mientras, aumentan las presiones internacionales sobre Israel.
En tanto, después de la renuncia de los ministros Gantz y Eisenkot, ambos ex comandantes en jefe del Ejército israelí, el primer ministro Netanyahu disolvió el gabinete de guerra, para evitar ceder a las presiones de los secretarios de Estado de la extrema derecha que forman parte de su coalición de gobierno.
Asimismo, la ONU dijo que “celebra” esta pausa humanitaria pero pidió que esto “lleve a nuevas medidas concretas” para facilitar la entrada de ayuda, indicó Jens Laerke, el portavoz de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
