La familia Perez Companc escribe un nuevo capítulo en sus casi 80 años de historia empresaria. Tres hijos de "Goyo", Luis, Rosario y Pilar, adquirieron las participaciones de sus hermanos Jorge, Cecilia y Catalina en las mayores empresas del grupo: Molinos Río de la Plata, Molinos Agro y la energética Pecom. De esta forma, los compradores se quedaron con el control de las tres compañías, que el año pasado consolidaron una facturación de u$s 3500 millones.
Sólo en los casos de las dos Molinos, la transacción implicó unos u$s 498 millones, de acuerdo con los precios por acción que informaron al mercado ambas empresas, sobre las que, ahora, se abrirá una OPA.
Fundado en 1946, con la creación de una empresa naviera, en las décadas siguientes, Perez Companc se convirtió en uno de los mayores grupos de la Argentina. En 2002, le vendió a la brasileña Petrobras su activo insignia, la petrolera Pecom Energía. Desde entonces, se concentró en Molinos, una de las mayores alimenticias del país, que le había comprado a Bunge & Born en 1998. En 2016, escindió Molinos Agro, la unidad de comercialización de productos agrícolas. En 2015, había vuelto al negocio energético con la adquisición de los activos locales de Skanska. Tres años después, compró la local Bolland y consolidó a la nueva Pecom como una de las principales prestadoras de servicios en Vaca Muerta, con operaciones, también, en el exterior (Brasil y Colombia).
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En 2009, "Goyo" -durante años, el hombre más rico de la Argentina, con una fortuna personal calculada en u$s 1700 millones- dejó el timón de la nave familiar, renombrada Perez Companc Family Group, en manos de sus hijos. Comenzó, así, el proceso que se consolida ahora, bajo el liderazgo de Luis. "Con mis hermanas Rosario y Pilar, nos redefinimos y construimos una nueva unidad sobre la base de los valores que nos guían desde siempre", declaró en un statement de difusión interna quien ya era presidente de las tres empresas.
Molinos es una de las "dueñas de las góndolas" de la Argentina. Su portfolio incluye a las marcas Granja del Sol, Exquisita, Lucchetti, Matarazzo, Preferido, Vitina, Cocinero, Lira, Blancaflor, Nobleza Gaucha, Favorita, Don Vicente, Don Felipe, Chocoarroz, Nieto Senetiner, RucaMalen, Minerva, Gallo, Terrabusi (pastas), Arlistán y La Salteña. En 2023, sumó una facturación de u$s 800 millones, con 2500 empleados.
Por su parte, Molinos Agro, de 600 colaboradores, registró u$s 1900 millones. Y Pecom, con 8500 personas, recaudó u$s 800 millones.
En las dos Molinos, la familia tenía el 75% de las acciones, con participaciones iguales entre los seis hermanos. Ahora, pasarán a ser plenamente de los tres compradores. En ambas empresas, la ANSeS conservará su 20% y el 5% es flotante. Por tal razón, se abrirá ahora una oferta pública de adquisición (OPA) ya que, por regulación, deben ofrecer a los minoritarios el mismo precio pagado a los vendedores o el promedio de la acción en los últimos seis meses previos a la operación.
El precio pagado por Molinos fue de u$s 2,48 por acción, unos $ 2252,24 informó la empresa en una nota enviada al mercado. Agregó que el precio promedio del semestre previo fue de $ 3276,01.
En tanto, en Molinos Agro, los hermanos vendedores recibieron u$s 13,24. Es decir, $ 12.044,63 por papel. El precio promedio de la acción en los seis meses anteriores a la transacción fue de $ 20.499,87, informó esta compañía.
En el caso de Pecom, la familia tiene el 100% del capital de la energética. Al no ser cotizante, no hay obligación de realizar una oferta pública.
Tras esta reorganización, los hermanos vendedores seguirán con las otras empresas del grupo: Conuar (combustible nuclear) y Goyaike (producción agrícola y ganadera). "Cuando uno tiene una empresa familiar, cada uno tiene su mirada y sus intereses. Este acuerdo refleja eso: dónde cada uno quería ir hacia adelante", contextualizan fuentes cercanas a la familia, cuya holding, Santa Margarita, rinde homenaje a la primogénita de "Goyo" y "Munchi" Sundblad, fallecida a los 19 años en un accidente automovilístico .
En tal sentido, subrayan que el deal, que no implicará cambios en los management de las empresas, ratifica el rumbo estratégico que definió el grupo, "con un rol protagónico en los tres verticales donde desarrolla negocios: consumo masivo, agro y energía".
El foco de crecimiento de Molinos es capitalizar su know-how comercial, logístico y penetración en grandes cadenas de retail y expandirse a segmentos del consumo masivo más allá de los alimentos. Semanas atrás, modificó sus estatutos para incorporar los negocios de higiene y cuidado personal, limpieza y alimentos para mascotas, tal cual publicó El Cronista.
"Se requiere mucho más que sólo desarrollar marcas: hacen falta activo físico, licencias, capacidad y conocimientos técnicos...", explican por qué la llave de ingreso podría ser una M&A, tal cual hizo Molinos con marcas como Chocoarroz y La Salteña.
El norte de Molinos Agro, en tanto, será en optimizar las capacidades industriales y eficiencias operativas y logísticas. "Es un proveedor internacional de productos de la molienda de soja y cereales para clientes independientes de escala relevante. Si la Argentina, en algún momento, despega y pasa de una cosecha de 50 millones de toneladas a más de 60 millones, tenemos que estar preparados", dicen en el grupo.
Adonde aparece algo más nítido en el horizonte de corto plazo es en el negocio energético. "Desde 2015, Pecom se consolidó como proveedor integral de servicios para upstream petrolero. El paso natural es volver a operar campos. Estamos con la mira puesta ahí", anticipan.
Pecom formalizará, en las próximas horas, su participación en el Plan Andes, el proceso de desinversión en 55 áreas convencionales que inició YPF. "Estamos definiendo. Vamos a ofertar. Tenemos vocación de tomar cierta escala en el marco de ese proceso. Apuntaremos a varios bloques", sugieren en el grupo.
Esta semana, definirá los activos por los que ofertará. El viernes 7 de junio vence el plazo de recepción de propuestas que abrió el Banco Santander.
"El foco está puesto en volver a tomar la operación y definir una escala que haga fit con la compañía. Lo vemos como una gran oportunidad", dicen sobre la licitación de YPF. No será la única. "Confiamos en que lo de YPF incentive a otras petroleras a activar procesos similares", apuntan.
Como prestadora de servicios, además, buscará crecer en Vaca Muerta y en otros segmentos de la industria energética. La expansión del sistema eléctrico, por caso. Además, quiere capitalizar oportunidades en proyectos mineros, en especial, de cobre y litio.