Quienes esperaban bronca se llevaron una lección de talante, de juego democrático y de saber perder. La polémica moción de censura de Arahal, censurada más enérgicamente por la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE que por los propios vecinos del pueblo, se ha saldado este miércoles con vuelco político en la localidad de la Campiña sevillana, donde un pacto «contra natura» –así lo definió el secretario general del PSOE, Juan Espadas – ha puesto fin a diecisiete años consecutivo de gobierno de Izquierda Unida. Tras exponer los diferentes portavoces municipales sus posturas antes de la moción, la suma de los seis concejales díscolos socialistas y de los tres 'populares' sumaban mayoría frente a los ocho ediles de Izquierda Unida. Tras fotografiarse con el bastón de mando , Francisco Brenes (¿PSOE?) –la interrogación viene por el reciente expediente de expulsión que el edil ahora alegará–, se enfrentó al nutrido grupo de periodistas que se habían desplazado hasta el Ayuntamiento de Arahal tras el polémico pacto entre dos partidos antagonistas y la posterior reprimenda del Partido Socialista a nivel provincial, regional y federal. El flamante alcalde de Arahal comenzó su comparecencia recordando que lleva más de 35 años afiliado al PSOE y afirmando que sabe «perfectamente» cómo funciona su partido «y cómo cambia la política de un día para otro». Estas palabras de Francisco Brenes iban a modo de réplica de las duras declaraciones de Juan Espadas, quien había censurado un día antes este « profundo error » con el que los seis concejales socialistas demostraban «no tener claro las siglas en las que militaban y el proyecto colectivo del PSOE». Insistido por este periódico en la reprimenda del secretario andaluz , el nuevo alcalde de Arahal ha subrayado que « a Juan Espadas le puedo decir que posiblemente entré antes que él [en el PSOE]». «Sé perfectamente cuáles son las siglas y lo que representan». El primer edil de Arahal reivindica « cierta autonomía » para la gestión política de los concejales municipales porque «si somos meros representantes de Ferraz , no tiene ningún sentido ser concejal». Francisco Brenes, que ya lo había apuntado durante su intervención en el Pleno extraordinario, ha recalcado que está en político «para representar a nuestros vecinos», a quienes ha mandado un mensaje de tranquilidad para «que «entiendan que no les hemos traicionados ». Quizá, según Francisco Brenes, lo que sus vecinos «no entenderán» será «lo de Ferraz». Este periódico le preguntó también por la decisión de Javier Fernández –alcalde de La Rinconada, secretario provincial del PSOE y presidente de la Diputación– de destituirlo como asesor político en el organismo provincial. Francisco Brenes ha reconocido que ve esta decisión como «algo normal» porque « si ellos han perdido la confianza, es normal que me cesen ». En cambio sí ha criticado la decisión de expedientarlos de Ferraz, a cuyos dirigentes les ha criticado que «no puede ser que nos gusten las reglas del juego democrático en unas condiciones y no en otras». Cabe recordar que Pedro Sánchez accedió al Gobierno de España tras una moción de censura acordada con una amalgama de formaciones políticas.
