Se cumplen 30 años de la Liga del famoso penalti de
Djukic en el último minuto. ¡Cómo pasa el tiempo! Tres décadas después de aquella jornada final de infarto en la temporada 93-94, de todos los recuerdos que me dejó aquel alirón, uno sobresale por encima del resto: más que en ganar aquella Liga,
Johan y yo estuvimos toda la semana más preocupados en que no la perdiéramos nosotros. El Depor jugaba en su Riazor y ganando al Valencia era campeón. Nosotros recibíamos a un buen Sevilla en el Camp Nou, con delanteros como
Suker, y teníamos que ganar y esperar el fallo coruñés. Para entenderlo: 70% de opción de título gallego. La faena que tuvimos con
Johan fue repetirle a los jugadores del Barça en los días previos que lo que no podía pasar de ninguna de las maneras era que el Depor la ‘cagara’ y nosotros no le ganáramos al Sevilla. Eso sí era imperdonable. Hay que poner aquellos partidos en contexto: veníamos de las dos Ligas de Tenerife, en 1992 y 1993, con el Madrid perdiendo el liderato en Canarias y nosotros ‘pescando’ el último día. La primera pifia del Madrid en Tenerife sorprendió a muchos culés. La segunda ya la daban por hecha. Te paraban en la calle y te hablaban de “la flor de
Johan”. Había cambiado la mentalidad. En 1994, por tercera Liga seguida, llegaba otra última jornada con el Barça necesitando del pinchazo del líder, que ya no era el Madrid, sino el Depor, el Supedepor de
Bebeto, más inexperto que el Madrid pero jugando en casa. Los partidos se jugaron a la vez: Depor-Valencia y Barça-Sevilla. Y entonces pasó lo que más temíamos y tanto habíamos avisado: el Sevilla se avanzó por dos veces (
Simeone y
Suker). “Collons!”. No pudimos darle la vuelta hasta la segunda parte (doblete de
Hristo,
Romario,
Laudrup y
Bakero). En esa época nadie tenía móviles, pero en el banquillo muchos iban con el transistor en la oreja. Hasta los que jugaban preguntaban al pasar cerca del banquillo “¿Qué? cómo va el Depor?”. “0-0, 0-0, 0-0....”. Inevitable, se acaba jugando en dos estadios. Acabó nuestro partido, 5-2, pero el Depor-Valencia aún se jugaba.
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