Nicolás Posse, jefe de Gabinete de Ministros del gobierno de Javier Milei, despejó las dudas sobre una posible dolarización de la economía al afirmar que esta medida "no forma parte de la agenda" económica actual del gobierno. La declaración surgió como respuesta a una pregunta formulada por el senador Pablo Daniel Blanco, de la Unión Cívica Radical, en la anticipada comparecencia por escrito de Posse ante el Senado de la Nación, dos días antes de que se concrete su visita a la Cámara Alta para dar su primer informe de gestión, según se lo exige el artículo 101 de la Constitución Nacional.
En la respuesta a la pregunta 126 del legislador radical, Posse especificó que "la dolarización de la economía no está en la agenda económica", señalando en cambio la libre competencia de monedas como una "fase final del proceso iniciado en diciembre con el saneamiento de la hoja de balance del Banco Central".
"El Ministerio de Economía especifica que la dolarización de la economía no está en la agenda económica, pero sí la libre competencia de monedas vigente como fase final para el proceso iniciado en diciembre con el saneamiento de la hoja de balance del Banco Central.", contestó, textual, Posse.
En respuesta a la pregunta 127, en tanto, explicó que la libre competencia de monedas requiere un marco macroeconómico disciplinado, que incluya un superávit fiscal, acumulación de reservas internacionales y reducción de pasivos del Banco Central.
"En este sentido, las condiciones necesarias para implementar el régimen basado en la libre competencia de monedas son, principalmente, el superávit fiscal, la acumulación de reservas internaciones y la reducción de los pasivos remunerados del Banco Central a niveles sustentables y el saneamiento de su hoja de balance. Estas condiciones permitirán reducir la tasa de inflación y mantener la competitividad del tipo de cambio oficial, permitiendo avanzar con una liberalización paulatina y unificación del mercado de cambios", detalla el informe.
Hasta ahora, Posse había mantenido un perfil bajo, evitando eventos públicos y diálogos con la prensa. A diferencia de sus predecesores, quienes solían mantener un perfil más público, Posse optó por un enfoque más reservado desde que asumió su cargo bajo la presidencia de Milei.
En total, Posse contestó 1.286 preguntas y respuestas que ya han sido giradas por escrito.
