Como si de influencers o celebridad cuché se tratara, Baltasar Garzón y Dolores Delgado tuvieron ' reboda '. Es decir, que se casaron por segunda vez –la primera fue en diciembre- en un festejo muy andaluz en el que no faltó de nada: espectáculo ecuestre, flamenco a tope, buen jamón y hasta una recreación judicial. A pesar de que Baltasar Garzón (68 años) y Lola Delgado (61) son de otra generación, no se puede negar que están al tanto de las modas imperantes en la actualidad, al menos en términos de boda. Porque ahora entre el famoseo se lleva lo de la 'reboda'. Noticias Relacionadas Quién es Marcela Topor, mujer de Carles Puigdemont: una pitonisa rumana con experiencia en televisión María Albert La escapada del Rey Felipe y el amor entre Alejandra Rubio y Carlo Costanzia: las revistas de la semana F. B. Fue el domingo cuando un repeinado Baltasar Garzón se presentaba a la cita con traje oscuro esperaba para casarse de nuevo con su pareja de los últimos 30 años . Flanqueado por caballos de pura raza española entraba en la finca jienense de Enrique Ponce, lugar elegido para la celebración. La novia llegó puntual vistiendo un elegante traje de chaqueta blanco de falda larga y dispuesta a disfrutar de una ceremonia para la cual se distribuyó un timing entre todos los asistentes para detallar el momento de cada actividad prevista. Una simulación de juicio Y lo primero fue una ceremonia simulada. «Como si aquello fuera un juicio y el jurado los asistentes, primero intervino María, hija mayor de Baltasar Garzón, como si fuera abogada del jurista, para defender que su padre era apto para casarse con Lola. Guiño gracioso al que respondieron los hijos de la novia haciendo lo propio con su madre, también apta para comprometerse para toda la vida con Baltasar», relataba el diario 'El Mundo'. Después hablaron los testigos de ambos , Federico Soria, abogado penalista almeriense y padre de Ana Soria, pareja de Enrique Ponce. Y también Fernando Andreu, juez de la Audiencia Nacional e íntimo de la pareja. Todo ello amenizado por un cuarteto de cuerda que interpretó piezas de Mozart, Bach y Vivaldi. El acto concluyó con emocionadas palabras de los novios y el intérprete Álex Ortiz cantando la emblemática ' Las 13 rosas ', todo un guiño si se conoce el compromiso de la pareja con la Memoria Histórica. La canción hace referencia al fusilamiento de 13 mujeres de Juventudes Socialistas que fueron perseguidas por la falange antes de ejecutarlas. Código Desktop Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Finca Cetrina (@fincacetrina)
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En la boda también se proyectaron numerosos vídeos para felicitar a la pareja : Pedro Sánchez, Yolanda Díaz, Ana Belén, Joan Manuel Serrat, Miguel Ríos, Ramoncín, Joaquín Sabina o los veteranos periodistas Luis del Olmo y Paco Lobatón dejaron su testimonio ante la feliz pareja. «Antes del cóctel y posterior cena, los invitados pudieron deleitarse con una bonita exhibición ecuestre de doma de campo con unos 15 caballos españoles, entendemos que propiedad de Ponce. Que sepamos, no ha habido capea ni nada relacionado con los toros, y eso que Garzón es muy aficionado. Quizás mañana a modo despedida. Lo que sí hubo fueron mariachis y una actuación de Miguel Poveda », explicó 'El Mundo'. La preboda Muchos de los asistentes estuvieron presentes la noche anterior en la preboda que se organizó en la misma finca La Cetrina y que tuvo sabor flamenco. Un grupo contratado interpretó bulerías, sevillanas y rumbas ante unas 200 personas . Al cóctel, servido por el Catering Benidorm, no le faltó de nada y contó con atún de almadraba encebollado, steak tartar, gazpacho, ajo blanco, carrilleras y mucho jamón con una legión de cortadores. El banquete de la boda tuvo un sabor similar, muy andaluz, y hubo flamenco –o ' flamenquito ', como se le llama a esa vertiente más bailable y edulcorada- hasta altas horas de la madrugada . Varios autobuses recogieron a los invitados para poner fin a una serie de festejos que incluyeron boda, preboda de una segunda y nueva ceremonia. Lo que se lleva.
