La mayoría de las instituciones públicas del país tienen niveles bajos en términos de capacidad de gestión, según un informe de la Contraloría General de la República (CGR).
De las 290 entidades evaluadas, 276 (95%) no superan el nivel de madurez intermedio calificado con un tope del 75% en el Índice de Capacidad de Gestión de las Instituciones Públicas (ICG) elaborado por la CGR.
Solo el 5%, es decir, 14 instituciones, lograron un nivel avanzado, con una evaluación tope del 90%, mientras que ninguna alcanzó el nivel de optimización que supera el 90%.
“Estos resultados reflejan la necesidad de implementar mejoras en las diferentes dimensiones de la capacidad de gestión institucional”, indica la Contraloría.
El ICG evalúa el desempeño de las instituciones, centrándose en cuatro dimensiones esenciales: estrategia, estructura, competencias y equipos.
Por ejemplo, lo relacionado con competencias y equipos evalúa el fortalecimiento de las habilidades y el trabajo en equipo dentro de la institución. Esto incluye el desarrollo de habilidades blandas del personal, como la comunicación efectiva y el liderazgo, así como el seguimiento continuo y la evaluación del desempeño. Además, se considera el establecimiento de equipos de trabajo basados en procesos institucionales.
El informe revela que 62 de las instituciones se encuentran en el nivel de madurez inicial en la capacidad de gestión, como el Consejo Nacional de la Producción (CNP), cuyo rango en el ICG se ubica entre el 0% y el 25%.
108 se ubicaron en el nivel básico (25%-50%), entre ellas la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS); y 106 en el nivel intermedio (50%-70%), ubicándose aquí, por ejemplo, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Sólo 14 se situaron en el nivel avanzado (75%-90%), por ejemplo, la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), según los parámetros del informe.
El ICG agrupa a las instituciones en dos grupos de sectores: el básico, que incluye 12 sectores como agricultura y pesca, cultura, recreación y deportes, y desarrollo local, entre otros; y el intermedio, que abarca asuntos ejecutivos, legislativos, electorales y exteriores, así como asuntos monetarios y fiscales generales.
A nivel sectorial, el ICG reveló que el 63,2% de los sectores predominan en un nivel básico de capacidad de gestión, mientras que el 36,8% se ubica en el nivel intermedio. Estos resultados resaltan las oportunidades de mejora que pueden incidir directamente en la eficiencia, eficacia y calidad de los bienes y servicios que generan los diferentes sectores.
Ante estos hallazgos, la Contraloría recomienda que las instituciones integren prácticas para fortalecer la gestión de calidad, gestión para resultados, gestión de riesgos y sistema de control interno, con el fin de mejorar la eficiencia, efectividad y calidad de los servicios públicos.
Además, considera necesario que las instituciones desarrollen estrategias para mejorar la prestación de los servicios, estableciendo objetivos claros y evaluando el desempeño estratégico.
La gestión de calidad y la anticipación de riesgos estratégicos son esenciales, según la CGR, especialmente dado que solo el 46% de las instituciones evaluadas implementan estas prácticas, lo que limita su capacidad de gestión y la prestación de servicios.
