MÉRIDA, México -. La familia cubana que fue deportada el pasado 28 de marzo tras vivir dos años en EE. UU. ha contado el calvario que atraviesan y pedido a las autoridades que intercedan por su regreso.
“Por favor, devuélvanos, por favor. Mi hijo no duerme, sigue despertándose por las noches, quiere estar con sus amigos, con sus maestros. Pido encarecidamente que nos devuelvan para que mi hijo pueda volver a la escuela”, ha pedido, en declaraciones a Martí Noticias Belkis Rodríguez, quien fue deportada junto a su esposo Guillermo Picos y su hijo de 14 años Denis Picos.
También el adolescente ha relatado el trauma que le ha provocado la sorpresiva deportación.
“Me siento muy mal, asustado y nervioso”, comenta el joven que estaba a punto de graduarse de high school en Carolina del Norte, “ya yo había aprendido el inglés, me había costumbrado, me había asentado allá, ya llevaba tres años en la escuela”.
El joven se ha grabado en varios videos en redes sociales rogando al presidente Biden que los devuelvan a EE.UU.
“Estamos destruidos con esta situación”, apunta el padre, “el niño ya tenía sus planes de estudio, sus amistades, él está muy traumado con esta situación, llegando acá a Cuba le salió un nacido debajo del brazo, una llaga en la boca, otro herpes en el pie.
La familia reside desde hace ya casi un mes en un pequeño apartamento en La Habana, en el municipio Playa, y durante su entrevista con Martí Noticias se hace visible el trauma que experimentan.
El pasado 28 de marzo fueron enviados de regreso a Cuba, a pesar de tener la documentación de la I-220A en regla.
La abogada de los deportados, Grisel Ybarra, contó que la deportación se debió a una confusión puesto que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) el pasado 16 de febrero programó una cita con ellos el mismo día que su primera audiencia con un juez de inmigración.
Por el tráfico, llegaron tarde desde ICE a la audiencia con el juez, que ya había ordenado su deportación.
La familia, que residía en Carolina del Norte, fue obligada a montarse en un avión con destino a Miami y de ahí fueron devueltos a Cuba.
El hombre trabajaba como chofer de Uber, su esposa, en una empresa que se dedica al envío de remesas, mientras el adolescente estaba terminando la escuela secundaria.
Picos y su familia llegaron a EE UU en noviembre de 2021 por la frontera sur. LA solicitud de asilo les fue negada y se les entregó una forma I220-A.
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