Se cambian las tornas en Ferraz. La sede el partido socialista en Madrid, que durante semanas estuvo asediada por grupos ultraderechistas, ha recibido este sábado a miles de personas, que han acudido a mostrar su apoyo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras sus decisión de anular su agenda pública para “reflexionar” ante la campaña de “acoso y derribo” que dice estar sufriendo junto a su mujer, Begoña Gómez.
Miles de personas que han empezado a congregarse en la calle Ferraz desde alrededor de una hora antes de que comenzase el Comité Federal del partido han cantado consignas de apoyo a Sánchez. Desde “presidente” hasta “no estás solo” o “no pasarán”. Cuando la vicepresidenta María Jesús Montero apareció en las pantallas, instaladas en la misma calle, y lanzó un rotundo “Pedro, quédate”, la lluvia comenzó a amainar, bajaron los paraguas, subieron las banderolas rojas del PSOE y la multitud comenzó a corear el recurrente “quédate”.
Es la primera de las dos manifestaciones convocadas este fin de semana tras el anuncio del presidente. Este domingo habrá una marcha a las 19:00 desde Atocha hasta el Congreso de los Diputados en defensa de la democracia.
Mari Carmen, Reyes y Paquita son amigas. Vienen de Toledo y Sevilla. La primera, 69 años, hace de portavoz. “El sistema de bulos lanzado por la prensa corrupta está haciendo mella en nuestra democracia, vivimos un momento crítico”, advierte. “Independientemente de las ideas que tengamos, esta oposición no es oposición, es extorsión. Se están traspasando todas las líneas rojas”, dice. Ellas han decidido manifestarse “en apoyo a la democracia y a un señor que lo único que ha hecho es liderar un Gobierno de progreso y bienestar”.
Los miembros del Ejecutivo, el PSOE, sus socios de Sumar, sindicatos y algunas voces del mundo de la cultura han ido mostrando estos días su apoyo a Sánchez. Si en las elecciones del pasado verano, el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero fue capaz de insuflar ánimo a las bases socialistas, en esta ocasión ha vuelto a ser él quién ha reclamado a la militancia que “se movilice a favor de la democracia y el respeto, en favor de la justicia y de Pedro Sánchez”. “No nos podemos quedar quietos ni callados”, imploró.
Dicho y hecho. Juan Gómez, de 58 años, se puso rumbo a Madrid desde Murcia con su familia. “No había excusa”, dice, “quien quiera que este país siga avanzando tiene que estar aquí”. En la pechera de su chubasquero luce una pegatina, como tantos otros militantes y simpatizantes socialistas, en la que se lee “claro que vale la pena, quédate”. “Queremos que siga, pero le apoyaremos en lo que decida, porque ha hecho tanto por este país que no se merece otra cosa”, dice.
A las 11 de la mañana, cuando estaba convocado oficialmente el inicio de la concentración. Tomaba la palabra en el Comité Federal Eneko Andueza, el líder de los socialistas vascos. “Sois, de largo, lo mejor que tiene este partido”, les dijo a los asistentes.
Mari Carmen, de 59 años, decidió el mismo miércoles, cuando leyó la carta de Sánchez a los ciudadanos, que acudiría, “sí o sí”, a cualquier acto de apoyo que se celebrase. “Lo hago por mi nieto, porque no quiero que la gente joven crea que la política es ”fruta“ o ”frutero“ o lo que sea”, dice sobre la necesidad de que “cortemos las ofensas”.
Aparte de Pedro Sánchez, el único nombre que se coreó este sábado en Ferraz fue el de Salvador Illa. “Illa president”, clamaron sobre el candidato del PSC a la Generalitat de Catalunya, al que las encuestas dan como ganador.
Cuando el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, tomó la palabra, los simpatizantes socialistas comenzaron a corear más fuerte si cabe “Pedro, Pedro”, intercalado con gritos de “fuera, fuera”. “Vete a la Cope”, “falso” y “Judas” se desgañitaban algunos asistentes. Cuando el líder socialista, muy crítico con Sánchez, le garantizó su apoyo ante “una querella falsa que no puede tumbar a un presidente del Gobierno”: silencio.
Alejandro, 27 años, defiende “plantarse y no quedarse pasivo ante los bulos”. “Se nota que hay una especie de táctica orquestada con el objetivo de derrumbar al PSOE”, dice el joven, que menciona los audios publicados por elDiario.es este viernes, en las que se escucha al exsecretario de Estado de Seguridad de Rajoy, Francisco Martínez, reconocer que su Gobierno pidió a Villarejo espiar al padre de Begoña Gómez para “matar políticamente” a Sánchez. “Estas campañas”, dice el joven, “no son desde ahora y también las han sufrido otras formaciones, como Compromis y Podemos”. De fondo, Teresa Ribera vuelve a levantar a los simpatizantes socialistas: “Nos pueden llamar perros, porque somos fieles y leales”.