Cristina paseaba tranquilamente por el parque de la Maceta, en el distrito de Vicálvaro , cuando se percató a lo lejos de una situación extraña: dos mujeres de origen rumano rodeaban a «un señor muy mayor», ofreciéndole servicios sexuales hasta el punto «de tenerlo mareado». Las ladronas habían elegido a su víctima en una zona del enclave «donde no había mucha gente», por lo que la presencia de Cristina resultó clave para evitar cualquier tipo de desfalco. «Me acerqué y les dije que dejaran al hombre», recuerda a ABC, con la firmeza suficiente para lograr que se marcharan sin cumplir con su objetivo. Desde entonces, nadie en el parque las ha vuelto a ver, una 'desaparición del mapa' habitual entre este tipo de delincuentes. Esta modalidad, la de engatusar a una persona de avanzada en la calle y tratar de que acceda a abrir las puertas de su casa para robarle, también presenta otros 'modus operandi' todavía más extremos. Es el caso de lo que le sucedió a una mujer en una calle del distrito de Latina , después de que dos personas lograsen ganarse su confianza a fin de que esta inhalara sin saberlo una sustancia para anular su voluntad. Tras ello, acudieron a un cajero donde le sacaron unos 6.000 euro.; y luego a su domicilio, del que se llevaron diversas joyas y otros enseres de valor. Noticia Relacionada estandar No Ancianos, el blanco fácil de las bandas itinerantes de timadores: del abrazo cariñoso al botón rojo Aitor Santos Moya Esta semana se han reportado casos en Vicálvaro o la localidad de Tres Cantos, pero la lista va mucho más allá Fuera de este ámbito, el último Balance de Criminalidad publicado por el Ministerio del Interior, que data del cuarto trimestre de 2023, arroja otro dato revelador: en solo un año, las infracciones penales 'online' han subido en la región un 24,9 por ciento, con una cifra que roza los 80.000 hechos constatados. Dentro de este campo, las estafas informáticas pasan de las 72.000 (con un crecimiento del 25,1 por ciento), mientras que otros ciberdelitos completan la preocupante estadística con algo más de 7.000 y un incremento del 22,6 por ciento. No es de extrañar, por tanto, que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado también vuelquen esfuerzos en combatir este tipo de prácticas para evitar que los más vulnerables sufran sus graves estragos. Aprender a diferenciar entre contenidos ilegales o ilícitos, reconocer un discurso de odio y una noticia falsa, y evitar una suplantación de identidad ('phishing') o una situación de acoso y abuso sexual online ('grooming') son algunos de los objetivos de Ciberland, una instalación que la Policía Nacional mantuvo abierta la semana pasada en plena plaza de España. El proyecto ofrecía un recorrido de unos 20 minutos de duración por distintos espacios, en los que también se profundiza en el ocio virtual y sus consecuentes riesgos, el 'sexting' o el ciberacoso.