Carlos Sainz (Ferrari), flamante vencedor del Gran Premio de Australia, que se ha disputado en el circuito de Albert Park de Melbourne, logró de esta forma su tercera victoria desde que corre en la Fórmula Uno: la tercera con la escudería más laureada de la categoría reina.
Sainz, de 29 años, que debutó en la F-1 en 2015, a bordo de un Toro Rosso -reconvertido luego en Alpha Tauri y ahora Visa Cash App RB- firmó su primer triunfo en la división de honor del automovilismo hace dos cursos en Silverstone (Inglaterra), sede del Gran Premio de Gran Bretaña: una pista legendaria: que albergó, en 1950, la primera carrera de toda la historia de la F-1.
La pasada temporada, el talentoso piloto madrileño fue el único que rompió el tiránico dominio de Red Bull, al anotarse la única de las 22 victorias que no se apuntó durante 2023 la escudería austriaca. Sainz brilló en la noche de Marina Bay al ganar el Gran Premio de Singapur.
Este domingo, al triunfar en Melbourne -en una carrera que su compañero, el monegasco Charles Leclerc y el inglés Lando Norris (McLaren) acabaron en segundo y en tercer lugar, respectivamente-, Sainz logró su tercer triunfo en la Fórmula Uno, elevando a veinte su relación de podios en la categoría reina. El último de ellos, en la primera carrera del año, que había acabado tercero en Baréin el primer sábado de este mes.
El hijo del doble campeón mundial español de rallys -y cuádruple ganador del Rally Dakar- de idéntico nombre lo hizo, además, de forma épica: apenas dos semanas después de ser operado de urgencia de una apendicitis, motivo que le impidió tomar parte en el Gran Premio de Arabia Saudí.
Carlos elevó este domingo a 35 la relación de victorias españolas en la F-1. Las otras 32 las logró el doble campeón mundial asturiano Fernando Alonso, sexto con su Aston Martin en Australia.