Cada vez más empresas acuden a agencias de detectives para investigar si un empleado de baja ha exagerado una dolencia o, directamente, se la ha inventado para faltar al trabajo. Son, evidentemente, casos minoritarios o aislados, pero que hacen perder dinero a compañías privadas o entidades públicas como Verificaciones Industriales de Andalucía SA (Veiasa), que monopoliza el servicio de inspección técnica de vehículos (ITV) en la región. La factura no está cuantificada. Pero la sociedad dependiente de la Consejería de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía, que cuenta con una plantilla de casi 2.000 personas, entre indefinidos y temporales , ha contratado a detectives para reducir su coste al mínimo. Este 'comodín' se utiliza cuando los jefes...
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