El patrullero de la Armada Centinela ha realizado durante seis días el seguimiento de un convoy de tres mercantes rusos que eran escoltados por la fragata rusa Admiral Grigorovich y atravesaron aguas de jurisdicción española. El Centinela (P-72) se encontraba desplegado en una operación de seguridad marítima en aguas del estrecho de Gibraltar y mar de Alborán cuando fue avisado de la necesidad de seguir el tránsito del convoy ruso, que se alargó entre el 10 y el 16 de marzo . El convoy marítimo estaba formado por los buques Sparta IV, Yaz, Ursa Major y la fragata rusa Admiral Grigorovich . Según ha informado el Estado Mayor de la Defensa (Emad), el Centinela inició su seguimiento a estos buque s desde el límite norte entre aguas españolas y argelina hasta el estrecho de Gibraltar . Noticia Relacionada estandar No Putin destituye al jefe de la Armada rusa tras los ataques sufridos por la flota en el mar Negro Lo ha sustituido presuntamente por Alexánder Moiseev, aunque el Kremlin no se ha pronunciado al respecto Tras dos días de tránsito, y en las inmediaciones del Estrecho de Gibraltar, la fragata rusa puso fin a la escolta que estaba haciendo a los mercantes e invirtió el rumbo en dirección al Mediterráneo oriental . El Centinela hizo entonces una maniobra similar y continuó con el seguimiento de la Admiral Grigorovich hasta garantizar su salida de aguas de jurisdicción españolas al norte de Argelia. En ese punto, el patrullero de la Armada puso de nuevo rumbo en dirección al Mar de Alborán para continuar con su misión de vigilancia y seguridad marítima . Este tipo de seguimientos en aguas de jurisdicción española no son extraordinarios . El último tuvo lugar el pasado mes de diciembre, cuando la Armada vigiló durante una semana de un submarino ruso y su buque de apoyo logístico que atravesaron aguas de interés nacional. Primero lo monitorizó a su paso por el norte de España y, tras un seguimiento de Portugal, volvió a asumir la vigilancia a su paso por el Atlántico. También en abril del pasado año dos buques de la Armada monitorizaron durante una semana el tránsito a través de aguas de interés nacional de una agrupación rusa para asegurar su viaje desde el Mediterráneo Oriental hasta su destino final en los puertos rusos del norte. En esa agrupación también estaba incluida la fragata Admiral Grigorovich que ahora escoltaba los mercantes.
