Desde que comenzara la invasión rusa hace casi veinticinco meses, los países de Occidente se han volcado en ayuda humanitaria y militar a Ucrania. Drones, tanques o misiles son algunas de las armas que se han dejado ver en tierras ucranianas, y que han servido para defender el país durante el conflicto. Una tesitura que todavía continúa, y así, Francia suministró las poderosas bomba de precisión Hammer que ya se han dejado ver en los MiG-29 ucranianos.
De esta forma, la bomba de precisión Hammer, suministrada por Francia, ha aparecido por primera vez en servicio en Ucrania en un caza MiG-29 Fulcrum. El arma francesa, también conocida como AASM, es un kit de guiado de precisión que convierte bombas de caída libre en munición de precisión.
Está fabricado por la empresa francesa Safran y permite mejorar armamento ya existente como lo hace el estadounidense JDAM. JDAM permite alcanzar hasta 72 km, pero debe hacerlo siguiendo una trayectoria inclinada, mientras que el kit de guía y el propulsor del Hammer permiten dispararlo hacia arriba. La variante Hammer para bombas de 227 kilogramos, por ejemplo, proporciona un alcance de 70 kilómetros con el que la Fuerza Aérea de Ucrania podrá atacar a las fuerzas rusas a mayor distancia.
Hammer comenzó su desarrollo a finales de la década de los 90 y entró en servicio con el Ejército francés en 2007. Ha sido utilizado en combate en Afganistán, Irak y Libia y actualmente forma parte del arsenal de Egipto, India, Marruecos y Qatar. Se han desarrollado kits Hammer para su uso con bombas de 100 kg, 227, 500 y 1.000 kilogramos.
El apoyo militar de Occidente a Ucrania no ha gustado a Moscú, tanto que el Kremlin ha amenazado en varias ocasiones con el uso de armas nucleares y una hipotética Tercera Guerra Mundial. Putin, recientemente, ha denunciado que los soldados de la OTAN ya combaten en Ucrania y mueren "en grandes cantidades" en el campo de batalla.
Tras la victoria en las urnas, Putin también se refirió a un posible conflicto entre Rusia y la Alianza Atlántica, y dijo respondiendo que "en el mundo actual todo es posible". "Todos comprenden que eso nos colocará a un paso de una Tercera Guerra Mundial a gran escala. No creo que a nadie le interese esto", señaló.