Tres militares muertos y 12 hospitalizados en accidentes ocurridos durante maniobras desde el pasado mes de diciembre. Es la cifra que desde la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) ponen de relieve para exigir una vez más que la profesión militar sea considerada de riesgo. Y como nuevo ejemplo para justificar su reivindicación, exponen lo ocurrido hace pocos días en el Pirineo aragonés, donde nueve militares tuvieron que ser evacuados y hospitalizados con síntomas de congelación e hipotermia mientras realizaban unos ejercicios con "una meteorología extremadamente adversa".
En concreto, tal y como denuncian desde ATME en un comunicado, los efectivos del Batallón de Cazadores de Montaña Montejurra I/66 realizaban unas maniobras que incluían una instrucción nocturna en el Pirineo, donde tenían que hacer vivac. En la zona las condiciones meteorológicas eran muy desfavorables y las previsiones eran aún más adversas. Sin embargo, en esta ocasión, al contrario de lo que ocurrió en Cerro Muriano (Córdoba), los mandos decidieron anular parte de los ejercicios y realizar ciertas modificaciones para "velar por la seguridad e integridad de su personal".
Fue, según confirman desde ATME, la actuación del capitán de la compañía la que evitó que los afectados fueron más numerosos y con un pronóstico más grave, pues solicitó al jefe del Batallón tanto el cambio de la zona de vivac como la suspensión de las maniobras nocturnas.
Pese a ello, esta asociación denuncia que "hubo nueve afectados que fueron rápidamente evacuados al Hospital de Huesca y posteriormente, dos de ellos, al Hospital General de la Defensa de Zaragoza".
Este es el último caso de heridos o fallecidos durante unas maniobras registrado en pocos meses, por lo que desde la asociación vuelven a insistir en que "la profesión militar es una profesión de riesgo donde se prepara a sus integrantes para las situaciones más extremas y peligrosas, donde no existe el “riesgo cero”, pero ello no es óbice para minimizar todos los riesgos posibles, como ocurrió en esta ocasión".
Por ello, cargan contra la "nula inquietud mostrada por el ministerio de Defensa sobre este tema", recordando que aún esperan "su respuesta sobre una iniciativa remitida sobre este asunto a través de la secretaria permanente del Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas". Y denuncian esa "indiferencia" recordando "los datos extremadamente contundentes que se han podido conocer en los últimos meses".
Entre ellos, el más grave de todos, el ocurrido el pasado mes de diciembre en Cerro Muriano (Córdoba), donde dos uniformados fallecieron ahogados y otros dos tuvieron que ser hospitalizados por hipotermia (uno de ellos con parada cardiorrespiratoria previa). Junto a este caso, también recuerdan que el pasado mes de febrero falleció un militar y otro tuvo que ser hospitalizado tras sufrir un accidente con su vehículo cuando regresaban de unas maniobras.
