Hace más de 170 mil años que el ser humano comenzó a usar las primeras prendas, las cuales conocemos hoy en día como “ropa”, y cuyo principal objetivo es ajustarnos a las condiciones climatológicas. Al principio, la indumentaria era utilizada con ese fin: mantenerse cubierto. Sin embargo, con el tiempo comenzamos a darles un nuevo significado y también cambiando su forma y corte para ajustarla a diferentes necesidades.