Fiscales del estado de Virginia, en Estados Unidos, están investigando si las redes sociales de Meta , entre las que se encuentran Facebook e Instagram , están facilitando y beneficiando el tráfico de drogas , ha informado ' The Wall Street Journal '. El medio, que cita fuentes familiarizadas con la investigación y distintos documentos, apunta que los fiscales comenzaron a enviar citaciones a la empresa y a realizarle preguntas el año pasado. Estas estaban relacionadas con el contenido de drogas o la venta ilícita de sustancias a través de las aplicaciones del emporio. La Administración de Alimentos y Medicamentos también ha estado ayudando con la investigación, añadió el periódico. Este citó, además, a un portavoz de Meta diciendo en un comunicado: «La venta de drogas ilícitas va en contra de nuestras políticas y trabajamos para encontrar y eliminar este contenido de nuestros servicios». «Meta coopera proactivamente con las autoridades policiales para ayudar a combatir la venta y distribución de drogas ilícitas», añadió. Noticias Relacionadas reportaje Si Policía Nacional Minerva, la mejor 'app' contra el crimen del mundo tiene sello andaluz J. J. Madueño estandar No Meta creará un Centro de Operaciones Electorales de cara a las europeas para luchar contra la desinformación y el abuso de la IA M. L. El presidente de asuntos globales de Meta, Nick Clegg, dijo en la plataforma de redes sociales X, antes Twitter, el pasado viernes que Meta se había unido con el Departamento de Estado de EE. UU., la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito y Snapchat para ayudar a interrumpir la venta de drogas sintéticas en línea y educar a los usuarios sobre los riesgos asociados. Cabe recordar que las aplicaciones sociales de Meta, también WhatsApp, cifran las conversaciones entre usuarios de extremo a extremo. Esto implica que, nadie que no sea el emisor o el receptor del mensaje tiene acceso a la información que se comparte. Y eso está bien, porque las conversaciones son mucho más privadas. Pero también puede ser un obstáculo a la hora de evitar que estas herramientas sean empleadas para delinquir. Lo mismo pasa con las llamadas y las videoconferencias. Precisamente, la Unión Europea lleva tiempo trabajando para encontrar la forma de perseguir el envío de contenido pedófilo a través de aplicaciones de este tipo. Esto se hará, en principio, mediante el escaneo selectivo de las comunicaciones. Eso sí, siempre bajo mandato judicial.
