Bizum nació hace ya ocho años con el objetivo de extender los pagos inmediatos y crear un "método universal, sencillo, inmediato y seguro de pago online". Aunque este servicio era desconocido por la gran mayoría en 2016, en la actualidad, este cuenta ya con 26 millones de "bizumers" que lo utilizan a diario, 38 bancos afiliados, casi 59.000 comercios online y 9.450 ONG a las que donar.
Estas cifras corroboran la popularidad de Bizum que se ha convertido en uno de los métodos de pago más utilizados en nuestro país. No obstante, todos aquellos que decidan utilizar esta aplicación deben saber que hacer un Bizum es lo mismo que realizar una transferencia entre bancos, por lo que esta operación estará sujeta a las normas fiscales. Entonces, ¿a partir de qué cantidad se deben declarar los pagos a través de esta aplicación a Hacienda?
Aquellos fieles discípulos de este servicio de pago no tienen por qué preocuparse por rendir cuentas con la Agencia Tributaria en la próxima declaración de la Renta, ya que al igual que los movimientos bancarios, estos "bizums" están registrados. Sin embargo, aquellos que utilicen esta aplicación como herramienta de pago –tanto particulares como emprendedores–, deberán saber que cuando la suma anual de Bizum supere los 10.000 euros tendrán que declarar a Hacienda, ya que estas transferencias dejarán de considerarse esporádicas al tener un origen laboral o lucrativo. El propio banco será el que informe a Hacienda de los movimientos, por lo que es importante que esta misma cuantía aparezca reflejada en la declaración.
"Cuando esta cifra sea superada, tu misma entidad bancaria será quien notifique al fisco, pero para que los datos puedan ser cruzados correctamente, tú también deberás informar a través de las facturas emitidas", explican desde Bizum.
Asimismo, también se tendrán que declarar los "bizums" si se utiliza esta herramienta para cobrar la cuota del alquiler, al igual que cuando se realiza este pago por transferencia bancaria común.
Declarar los "bizums" en la campaña de la Renta se realizará al igual que si los ingresos se hubieran llevado a cabo en metálico a través de transferencias bancarias, así como mediante otras vías.
Sin embargo, aquellos que deban declarar sus "bizums" al fisco y no lo hagan se tendrán que enfrentar a multas que van desde los 600 euros hasta el 50% del valor total de las transacciones.
