Sánchez afirma que la amnistía hará “una democracia más fuerte”, leíamos hace un par de semanas. Llevamos meses leyendo lo mismo. Cualquier arbitrariedad del Gobierno, cualquier manipulación, cualquier corrupción no es que sea algo necesario, inevitable o democrático, sino que, por si fuera poco lo anterior, fortalece la democracia. Lo primero que nos sale es negarlo. Porque en nuestra mente, moldeada por años y años de adoración acrítica, democracia es sinónimo de bueno y de incorruptible, y es antónimo de tiránico y de autoritario. Todo es mejor cuanto más democrático, y ...