La explotación del turismo en nuestro país es cada vez más evidente. Prueba de ello es, por ejemplo, la propuesta de cerrar la Plaza de España de Sevilla para cobrar entrada a los visitantes. La turistificación es aún más obvia en la fiebre de pisos vacacionales que se ha dado en más de una provincia española -especialmente de costa-, limitando el mercado de alquileres a menos del 50% de las viviendas. El pasado 2023 visitaron España 85,1 millones de turistas y el alojamiento en viviendas de alquiler aumentó un 69,1% frente a 2022, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional ...