En un movimiento muy poco común, las cinco asociaciones militares con representación en el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas (Coperfas) se unieron en febrero para solicitar la convocatoria de ese órgano de interlocución con el Ministerio de Defensa, con el fin de abordar allí la mejora de los salarios de los militares.
El reglamento del consejo establece que “se reunirá en sesión extraordinaria cuando sea convocado por su presidente, a iniciativa propia o a solicitud de la mayoría de los representantes de las asociaciones profesionales”.
Tras varias semanas de espera, el Ministerio de Defensa ha fijado un pleno extraordinario monográfico sobre retribuciones para el miércoles 20 de marzo. Ese día se celebrará un pleno ordinario, los dos seguidos.
Las asociaciones profesionales de las Fuerzas Armadas pidieron que esa reunión la presidiera la ministra Margarita Robles. En principio, la solicitud no ha tenido éxito, ya que la convocatoria que han recibido indica que el pleno será presidido por la subsecretaria de Defensa, Adoración Mateos, quien asume las competencia sobre personal del ministerio.
La negativa de la ministra a asistir a la reunión para tratar sobre los salarios en las Fuerzas Armadas no ha sentado bien en las asociaciones de militares, según ha podido saber El Chivato. “Para variar”, comentan algunos representantes de asociaciones profesionales de las Fuerzas Armadas sobre la ausencia de Robles y su decisión de delegar en la subsecretaria.
¿Desde cuándo no asiste la ministra de Defensa a una reunión del Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas? A esta pregunta, portavoces de las asociaciones respondieron ‘a bote pronto’: “Hace tanto que habría que mirar las actas” de esos plenos.
Hubo quien aventuró que el último encuentro con la ministra habría tenido lugar en marzo de 2019 (hace ahora cinco años), cuando se celebró un pleno, precisamente también a petición de las asociaciones profesionales, para tratar sobre posibles mejoras salariales.
Según asistentes a la reunión, Robles les dijo en esa ocasión que tenía preparadas medidas para subir los sueldos pero que no podía aprobarlas hasta que pasaran las elecciones: Pedro Sánchez acababa de adelantar las elecciones generales al 28 de abril de 2019. “Todavía estamos esperando las mejoras”, comentan con sarcasmo.
Alguna asociación apuntó que no tenían contacto con la ministra desde la toma de posesión de enero de 2020, después de que Pedro Sánchez formó el Gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos y confirmó a Margarita Robles en Defensa, donde ya era ministra desde junio de 2018.
“Desde la pandemia”, “mínimo desde el Covid”... señalaron otros. Una búsqueda por las webs de las asociaciones de militares permite comprobar que Robles presidió un pleno telemático en abril de 2020, durante el estado de alarma por la crisis del coronavirus, para tratar sobre problemáticas que sufrían los militares movilizados en la ‘Operación Balmis’.
Pero hubo al menos otra reunión posterior presidida por la ministra. Tuvo lugar hace tres años, en marzo de 2021, y una vez más, se trató de un pleno extraordinario convocado a instancia de las asociaciones con objeto de abordar el asunto de las retribuciones.
Fue una reunión presencial y no telemática. Robles presentó algunas mejoras salariales que había aprobado el Gobierno, y que tenían que consolidarse en el real decreto del reglamento de retribuciones de las Fuerzas Armadas. Los resúmenes que hicieron asociaciones como ATME y Asfaspro confirman la asistencia de la ministra.
Desde entonces, no hay noticias de que Margarita Robles haya acudido al Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas.
En alguna ocasión ha sucedido que no estaba prevista su presencia pero la ministra se incorporó “por sorpresa”. Así ocurrió en diciembre de 2019, cuando, sin avisar, se presentó en un pleno ordinario que presidía el subsecretario. Felicitó la Navidad a los representantes de las asociaciones y les anunció que tenía la firme intención de aprobar mejoras salariales.
Ya en enero de 2020, también dejó caer que planeaba cambios en el modelo de carrera militar para intentar solucionar las quejas por la salida a los 45 años de los militares de la Escala de Tropa y Marinería.
Las ausencias de la ministra, y sobre todo, la negativa del ministerio a negociar una mejora sustancial de los sueldos que se cobran en las Fuerzas Armadas, han provocado algunos plantes de portavoces de las asociaciones, que se han levantado de la mesa en plena reunión.
Así sucedió en diciembre de 2021, cuando cuatro de las cinco asociaciones decidieron abandonar la reunión al comprobar que la subsecretaria no pensaba abordar el asunto de las retribuciones.
Desde entonces, la Asociación de Tropa y Marinería (ATME) se niega a acudir a los plenos del Consejo de Personal. Como excepción, al extraordinario sobre retribuciones convocado para este miércoles sí ha decidido asistir.
Si Robles no acude, la subsecretaria Adoración Mateos tendrá que hacer frente a las preguntas de las asociaciones sobre los planes para mejorar el sueldo a los militares, justo después de que se haya sabido que el Gobierno renuncia a aprobar los Presupuestos Generales del Estado para 2024, en los que podría haber incluido algún aumento salarial.
Se añade que la inclusión en las nóminas de parte de la Escala de Tropa y Marinería de 300 euros extra como pago de un “incentivo” ha enfadado a las asociaciones de oficiales y suboficiales, que no lo van a cobrar. Tampoco las de Tropa y Marinería ven con buenos ojos estos pagos puntuales, que critican por “discrecionales” y “discriminatorios”.
