Este chico va a ser una bomba”, dijo Xavi Hernández el primer día que Lamine Yamal subió al primer equipo. Entonces tenía 15 años y era Cadete. Ahora, que tiene 16, el chico está consolidado en el primer equipo. Es más, está tirando del carro de un Barça en horas bajas y, junto a su amigo Pau Cubarsí, con quien ha crecido como jugador en todas las categorías, son la gran ilusión del barcelonismo. Más aún después de que ambos fueran protagonistas ante el Nápoles y en los últimos encuentros de los blaugrana.
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