El tiempo pasa muy deprisa y la Fundación Prodis, que tiene ya más de veinte años de vida, celebra ya la XV edición de su concierto extraordinario. Mi contacto con ella y con lo que representa se produjo años después, concretamente 2009, cuando participaron el tenor José Manuel Zapata y Ruggero Raimondi, su marido y célebre bajo, acompañados al piano por Rosa Torres Pardo. Entonces no sabía nada de la institución y mi único contacto con el síndrome de Down era su hijo Rodrigo.
Afortunadamente, la iniciativa prosperó y el concierto se viene repitiendo desde entonces con artistas de entre los más populares de nuestro tiempo, que se prestan generosamente a apoyar a Prodis en su empeño por acercar la discapacidad a la sociedad, ayudándoles en su desarrollo personal y en su inclusión social y laboral, así como proporcionándoles los apoyos necesarios en orden a mejorar su calidad de vida.
Ruggero Raimondi ha venido actuando como anfitrión, solista en arias o romanzas y partícipe en dúos. Los años pasan y nos hacemos mayores, por lo que el gran artista ya se limita a saludar. Tras al citado José Manuel Zapata en aquel inicial 2009, escuchamos a las sopranos Mariola Cantarero, Isabel Rey, Sabina Puértolas, Ruth Iniesta, Carmen Solís y Virginia Tola; a la mezzo María José Montiel; a la contralto Marina Pardo; a los tenores Israel Lozano, Aquiles Machado y José Cura; a los barítonos Carlos Álvarez, Leo Nucci, Mario Cassi y Gerardo Bullón; a los pianistas Rosa Torres Pardo, Edelmiro Arnaltes, Patricia Barton y Roberto Ugarte; la sorpresa de las castañuelas de Lucero Tena; el Proyecto Zarza del Teatro de la Zarzuela... Incluso se contó con Ana Belén y Enrique Viana, siempre un gran maestro de ceremonias con ideas que sorprenden a todos y que repite este año. Durante estos quince años nos hemos divertido y, naturalmente, vivido muchas anécdotas. Así cuando Raimondi se quedó afónico tras cantar el aria de Felipe II del «Don Carlo» verdiano y Leo Nucci hubo de improvisar canciones como «Amapola» o «Solamente una vez». La música es cultura, pero también diversión y ambos aspectos se combinaron estupendamente en la cita de Prodis.
En la edición de hoy estarán Enrique Viana, el barítono César San Martín, la soprano Ruth Iniesta y el Coro Molto Vivace, acompañados al piano por Ramón Grau.
Desde aquel 2009 siempre me ha emocionado ver en el escenario del Auditorio Nacional a los niños y jóvenes que han pasado con Prodis. Muchos de ellos están ya trabajando en diversas empresas y aportando su granito a la sociedad. Sin embargo, realmente entendí el alcance del trabajo que desarrolla la institución con ocasión de la obra de teatro «Olivia y Eugenio» en 2015. Ver actuar a Rodrigo junto a nuestra añorada gran Concha Velasco supuso una experiencia impactante que me hizo comprender que aún son pocos los muchos premios –UBS, Fundación Vodafone, Cepsa, CBRE, Randstad, etc.– recibidos por la Fundación Prodis.
Y, en esta ocasión, me viene a la memoria una canción de 1960, de cuando yo tenía diez años y empezaba a disfrutar del pop con esta célebre pieza del Dúo Dinámico y la «Diana» de Paul Anka. Sí, «¡Quince años tiene mi amor!», por Prodis, Ruggero, Isabel y Rodrigo.
