Fuerzas aéreas israelíes atacaron también un segundo lanzacohetes en Rachaya al Foukhar, en el sur del Líbano.
El Ejército israelí confirmó, este domingo 10 de marzo, haber identificado 37 lanzamientos de cohetes desde el Líbano en dos tandas hacia su territorio, algunos de ellos interceptados, que hicieron sonar las sirenas antiaéreas en distintas localidades de Israel.
“Tras las sirenas en el norte de Israel, se identificaron unos 37 lanzamientos desde el Líbano hacia territorio israelí, algunos de los cuales fueron interceptados”, indicó un comunicado castrense.
En la primera tanda se lanzaron 30 cohetes, de los que el sistema de defensa Cúpula de Hierro interceptó uno, ya que el resto cayeron en zonas despobladas; mientras que en la segunda ronda interceptó seis, según un portavoz militar.
El Ejército también informó que, durante la noche, un grupo de aviones de combate atacaron infraestructura de la milicia chií libanesa Hizbulá en el área de Ayta ash Shab, un puesto de lanzamiento de misiles antitanque en Maroun El Ras y una estructura militar en la que se identificaron a supuestos milicianos en Khirbet Selm, en el sur de Líbano.
Hizbulá reivindicó esta mañana el lanzamiento de “decenas de cohetes” hacia el área del Monte Meron, por lo que este atacó después un “lanzacohetes en Kounine”, el cual habría sido usado para esos ataques, según un comunicado castrense.
Fuerzas aéreas israelíes atacaron también un segundo lanzacohetes en Rachaya al Foukhar, en el sur del Líbano, desde el cual Hizbulá habría disparó “docenas de cohetes contra el área del Monte Hermón”.
El grupo chií confirmó esta mañana la muerte de tres de sus combatientes: un miembro de su unidad de élite Radwan y sus dos hijos, también milicianos, según medios árabes, en el ataque en Khrirbet Selm, donde también murió la madre de familia.
Israel e Hizbulá están enzarzados en un intenso fuego cruzado desde el pasado 8 de octubre que ya se ha cobrado la vida de al menos 334 personas, la mayoría milicianos de Hizbulá en Líbano, que ha confirmado 232 bajas, algunas de ellas en Siria.
Al menos 17 personas han muerto en el norte de Israel —10 militares y 7 civiles— mientras que al otro lado de la frontera han fallecido, además de los combatientes de Hizbulá, otros 37 integrantes de milicias palestinas, un soldado libanés y 47 civiles, incluidos diez menores y tres periodistas.
Los enfrentamientos, los peores desde la guerra en el Líbano de 2006, se han recrudecido en las últimas semanas y ante la tentativa de una solución diplomática, Hizbulá ha reiterado que no negociará hasta que no cese la guerra en Gaza.
