Un juez de Ecuador ordenó el ingreso en prisión provisional de los tres detenidos durante un operativo en el que se decomisaron más de 1,2 toneladas de cocaína, entre ellos dos policías en activo que presuntamente formaban parte de la estructura criminal, según informó este viernes la Fiscalía en un comunicado.
Los policías ingresarán a la Cárcel 4, de Quito, mientras que el tercer detenido irá a la Penitenciaría del Litoral, la cárcel más grande y poblada del país, situada en Guayaquil.
Los tres detenidos fueron capturados durante el registro de un inmueble en el municipio de Yaguachi, de la costera provincia de Guayas, a donde llegaron policías antidrogas tras recibir una denuncia reservada de que en el lugar se almacenaba una gran cantidad de droga, lista para su traslado al extranjero.
En la acción, dos de ellos fueron arrestados cuando salían del inmueble en dos vehículos y al tercero se le detuvo dentro de la vivienda, mientras que otras personas que se encontraban en el lugar lograron escapar.
Al inspeccionar el lugar, los agentes encontraron también diecisiete armas de fuego, incluidos rifles, fusiles, pistolas y revólveres, además de cerca de 4.000 balas de distintos calibres, diez prendas del servicio investigativo de la Policía Nacional, cinco teléfonos celulares y siete automóviles.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, elevó desde inicios de años la lucha contra el crimen organizado a la categoría de “conflicto armado interno”, y desde entonces el volumen de drogas decomisadas asciende a más de 64 toneladas.
Rodeado por Colombia y Perú, los dos mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador se ha vuelto en los últimos años en un punto clave del tráfico mundial de esa droga, al aprovechar las mafias sus puertos y costas para enviar toneladas de esa droga hacia Europa y Norteamérica.
Esto le ha hecho a Ecuador ser también en el tercer país del mundo que más droga decomisa, sólo por detrás de Colombia y Estados Unidos, pues anualmente ha superado las 200 toneladas de estupefacientes incautados en los últimos tres años.
Las bandas del crimen organizado que operan en Ecuador han tejido nexos con los mexicanos carteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, según las autoridades ecuatorianas, y el transporte en lancha o semisumergible se ha vuelto frecuente para hacer llegar la droga a Norteamérica.
Al mismo tiempo también se han vinculado a la mafia albanesa para los envíos a Europa, en contenedores de mercancías que se embarcan en los puertos ecuatorianos.
EFE